El director social del Hogar de Cristo, Paulo Egenau, aseguró que un país como Chile no puede aceptar que ancianos estén en condiciones inaceptables.
"Nos alegramos profundamente que este debate", indicó.
El director social del Hogar de Cristo, Paulo Egenau, valoró el debate en torno a sistema previsional asegurando que, actualmente, muchos ciudadanos "van a enfrentar los últimos años de su vida en condiciones indignas e inaceptables".
"Nos golpea como Hogar de Cristo muy profundamente, porque las personas para las que trabajamos, los que nos muestran la vida de todos los días de su vida, cuando llegan a ser viejos o adultos mayores fuera del mercado laboral se ven enfrentados a las peores condiciones", dijo en conversación con El Diario de Cooperativa.
Y añadió que "nos alegramos profundamente que este debate, al igual que el de educación, se esté poniendo sobre la mesa, pero no dejemos de poner el foco fundamental en la clase media –que me parece correctísimo- sino que también en aquellos compatriotas y ciudadanos que son los que van a enfrentar los últimos años de su vida en condiciones indignas e inaceptables".
"Eso un país como Chile no lo puede aceptar, de la misma forma que no puede aceptar que haya 100 mil niños fuera del sistema escolar en el minuto que se debate profundamente la reforma educacional, ellos no están siendo mirados", añadió.
Por último, Egenau se refirió a la colecta realizada este viernes por el Hogar de Cristo para personas con discapacidad menta.
"La intención de la campaña tiene la intención de que nos detengamos a pensar sobre los prejuicios (...) Discriminamos todos, todos vivimos con prejuicios", enfatizó.
En ese sentido, explicó muchos creen que las personas con discapacidad mental "son personas incapaces, total y completamente limitada, incapaces de autogobernarse, de tomar decisiones autónomas, de incluirse en la sociedad a través del mercado laboral, de participar en la actividad política, económica y cultural del país, de educarse... todos esos prejuicios finalmente van construyendo mitos que nos transforman en una sociedad tremendamente excluyente", concluyó.
