El obispo emérito de Osorno, Juan Barros, llegó este jueves hasta la Brigada de Delitos Sexuales de la PDI a declarar ante persecutores de la Fiscalía Metropolitana Sur por el presunto encubrimiento de abusos sexuales del que se le acusa.
El párroco declaró en calidad de imputado por el supuesto encubrimiento de los abusos sexuales -en Iquique y Santiago- del ex capellán del FACh, el sacerdote Pedro Quiroz, mismo caso por el que fue citado el sacerdote Cristian Precht.
"Le manifesté al señor fiscal lo que yo había podido conocer o desconocer, y esperemos en Dios que salga todo bien y que la verdad vaya restableciéndose", dijo Barros, quien se enfrentó a los fiscales por más de tres horas.
El religioso evitó pronunciarse sobre otros casos de abuso en los que se le involucra y enfatizó que aportó todo lo que podía aportar.
Cabe recordar que Juan Barros también fue obispo Castrense, donde supuestamente encubrió los abusos del ex capellán.
En esa línea, la tesis de la Fiscalía es que los obispos y sacerdotes castrenses, al ser parte del Ejército, son funcionarios públicos, por lo tanto, tienen la obligación de denunciar los delitos de los que se enteran.