"Él quiere ir a Roma y escuchar al papa", dijo Cristián Caro previo al encuentro de los obispos con Francisco.
Hasta el momento, se han bajado de la reunión Francisco Javier Errázuriz, Andrés Arteaga y Jorge Medina.
El arzobispo de Puerto Montt, Cristián Caro, justificó el silencio que ha tenido el el jefe de la Diócesis de Osorno, Juan Barros, previo a los encuentros que sostendrán los obispos chilenos con el papa Francisco en el Vaticano, y reconoció que la Iglesia chilena fue "lenta" al abordar los casos de abusos sexuales.
El sacerdote, que viajará a Roma para las reuniones que se realizarán entre el 14 y el 17 de mayo, sostuvo que "es lógico que él (Barros) se mantenga en silencio, porque él quiere ir a Roma y escuchar al papa, porque el papa lo nombró, él renunció dos veces y el papa mismo lo dijo acá en Chile, el mismo papa le dijo que siguiera".
"Donde en la Iglesia hubo una falla es que fue lenta en el abordamiento de este tema, pero llegó el momento en que se escuchó. A lo mejor no fue como lo ha hecho el papa, que se reunió con ellos", dijo en referencia a los denunciantes de Fernando Karadima, que fueron recibidos por Jorge Bergoglio en Roma y les pidió perdón.
El obispo de Puerto Montt también defendió al arzobispo emérito, el cardenal Francisco Javier Errázuriz, quien se bajó del viaje, sosteniendo que "se ha hablado muy mal del cardenal Errázuriz y el cardenal Errázuriz fue el que pidió a Roma que se levantara la prescripción para el proceso canónico".
Andrés Arteaga, obispo auxiliar de Santiago y cercano a Karadima, y el cardenal Jorge Medina también confirmaron que no participarán de la reunión con el papa.
