Tras la decisión de los obispos chilenos de poner sus cargos a disposición del papa Francisco al finalizar las reuniones en Roma con Jorge Bergoglio a raíz de los casos de abusos en la Iglesia, los sacerdotes siguen a cargo de sus respectivas diócesis mientras el pontífice no acepte sus renuncias.
Una hora después de que los obispos en Roma anunciaran que todo el Episcopado chileno estaba renunciado, aterrizó en Chile un grupo de 10 de ellos, incluidos los cardenales Francisco Ezzati y Francisco Javier Errázuriz.
El obispo de Chillán, Carlos Pellegrín, explicó que "la situación permanece, nosotros seguimos en completo control y rol como obispos en nuestras diócesis".
Indicó que informaron su disposición a renunciar "para que el papa esté libre, esa es la idea. No queremos decirle al papa 'mire, ahora tiene usted su barco, usted manéjelo solo', por el contrario. Cuando usted pone a disposición del Santo Padre su cargo, está reiterando algo que siempre existe. El papa nombra al obispo y sólo el papa lo puede remover".
En Roma, Juan Ignacio González, obispo de San Bernardo, también precisó que mientras el papa no tome una determinación, cada uno de los obispos de la Conferencia Episcopal continúa en sus trabajos pastorales.
La duda está respecto a en qué condición queda el cardenal Errázuriz, pues es arzobispo emérito y no tiene una diócesis a su cargo, aunque sí es parte del consejo de cardenales que asesora el papa.
"Es la primera vez que llaman a toda la Conferencia Episcopal"
Por su parte, los Laicos de Osorno, que por años han pedido la salida del obispo Juan Barros, dijo que se debe ser cauteloso pues esto no significa que todos los obispos se vayan a ir.
Su vocero Mario Vargas planteó que "esperamos mucho tiempo, tres años esperando en esta resistencia pacífica profética orante que llevamos en Osorno, un golpe de timón de Francisco. Hoy día lo tenemos, el documento contundente que hace llegar a los obispos chilenos y les dice en su cara que han sido encubridores de abusos sexuales, que han cometido delitos, que han quemado documentos".
"En esta gravedad, en este contexto, nosotros creemos fue justo y necesario que estos obispos, que se ven comprometidos a través de su seguimiento en estas situaciones hayan presentado su renuncia en masa", indicó.
Los laicos, que realizarán una velatón a las 19:00 horas de este viernes, esperan que el obispo Barros no regrese a la ciudad.
Mientras que la abogada experta en derecho canónico, Ana María Celis, comentó que "es la primera vez que llaman a toda la Conferencia Episcopal, de partida, porque lo de Islandia, que fue lo último, fue con Benedicto XVI, y ellos durante muchos años y bien paulatinamente se aceptó la renuncia de cómo ocho obispos pero a lo largo de 20 años".
"De verdad acá hay cuestiones que pueden ser miradas como burocráticas, pero que también uno dice mejor demorarse un poco más", añadió.