La información fue entregada por la ministra Javiera Blanco a la comisión investigadora de la Cámara Baja.
La diputada Marcela Sabat (RN) pidió una reingeniería del sistema.
La ministra Blanco viajará en los próximos días a Rancagua para conocer la situación del Pequeño Cottolengo.
187 personas que vivían en residencias a cargo del Servicio Nacional de Menores (Sename) han fallecido en los últimos 12 años, entre 2005 y 2016, según cifras presentadas este lunes por el Ministerio de Justicia a la comisión investigadora de la Cámara de Diputados.
La ministra Javiera Blanco destacó la entrega de esta información y precisó que el Sename atiende a una gran cantidad de menores discapacitados y con enfermedades crónicas.
"Es una información que nunca se había entregado formal y oficialmente. Yo creo que lo primero es saludar la transparencia, la responsabilidad y la seriedad con la que hoy día estamos abordando un tema que es tan importante para todos los chilenos y chilenas", indicó.
"Hay distintas razones y causales de las que nosotros vamos a dar cuenta en el oficio en que se nos pida, que hayan enfermedades basales. Hay que informar también nosotros hoy día tenemos una población que está atendida por el Servicio Nacional de Menores que están en situación de discapacidad", aseveró.
Por su parte, la diputada Marcela Sabat (RN), que preside la comisión investigadora, planteó que "en las manos de quien tiene que garantizar a los niños más vulnerables de nuestro país que estén en buenas condiciones, hoy día nos damos cuenta de que hay un número alto de ellos que han muerto".
"Desde allí es que lógicamente hemos hecho un llamado a la comisión a trabajar de forma ardua en una reingeniería de este sistema, del Sename", dijo.
En relación a los dos últimos casos de fallecimientos registrados en el hogar Pequeño Cottolengo de Rancagua, la ministra aseguró que viajará esta semana a la zona para conocer las condiciones del recinto.
Más de 700 plazas ocupadas por mayores de 18 años
Son cerca de 8.000 las plazas con las que cuentan las residencias entre las de administración directa del Sename y las de organismos colaboradores acreditados y, de esas, más de 700 serían ocupadas por mayores de 18 años.
El director nacional del servicio, Hugo Herrera, detalló que "sobre la cantidad de adultos con discapacidades graves que tenemos en el Sename, esta es una cifra superior a los 700 hasta los 67 años".
"Di un ejemplo del caso de Óscar, del cual hice cambio de nombre, que es una persona de 67 años que murió en diciembre de 2015, que entró a los nueve años a lo que era el Coname y su única familia terminó siendo una residencia del Estado, hoy subvencionada por lo que es el Sename, pero sino estaría en un abandono total. Por lo tanto, no tenía otra opción de vida", añadió.
A su vez, el diputado DC, Ricardo Rincón, también integrante de la comisión investigadora, sostuvo que esta es una situación que el Estado debe transparentar y hacerse cargo.
"Hemos, por lo menos nosotros, aportado que hay residencias donde el número de adultos y de adultos mayores supera con creces a los niños, niñas y adolescentes. Se produce un quiebre respecto a la misión institucional del Sename en estas condiciones", aseguró.
Dio cuenta que "muchos de ellos superan con creces la atención que debe dar una institución que tendría y debiera tener otro norte".
Es así como, por ejemplo, en el hogar Pequeño Cottolengo de Rancagua hay solo 26 niños, mientras que la cantidad de adultos supera los 130.
