El 21 de octubre del año pasado, el Presidente Sebastián Piñera inauguró en Coyhaique la primera residencia familiar del Sename (Servicio Nacional de Menores) a nivel nacional. El nuevo modelo llegó para reemplazar a los Centros de Reparación Especializada de Administración Directa (Cread), fuertemente cuestionados por casos como el de Playa Ancha.
La casa, puesta en marcha en octubre, está ubicada en una zona céntrica y residencial de la capital de la Región de Aysén, tiene 360 metros cuadrados y su capacidad es para 15 jóvenes vulnerados de entre 14 y 18 años, derivados por Tribunales de Familia.
"Este centro que estamos inaugurando hoy día no es un lugar inhóspito, distante, lejano; es parte de la comunidad, es una casa donde van a vivir niños a quienes queremos reproducirles un ambiente de hogar, de familia, donde puedan jugar como todos jugábamos cuando éramos niños en las veredas, en las calles, tener vecinos, ser parte de la comunidad", aseguraba Piñera en la inauguración.
A 10 meses del hito, la realidad dista de esa aspiración.
"Una relación sentimental asimétrica"
Hace dos semanas, una educadora de la residencia fue suspendida de sus funciones a raíz de una investigación tras una denuncia en su contra. En ella se indica que la mujer, de 24 años, mantenía "una relación de carácter sentimental" con uno de los menores internos.
La existencia de la denuncia fue confirmada por el seremi de Justicia de Aysén, Eugenio Canales. Además, un trabajador de la residencia, que solicitó el resguardo de su identidad, relató a Cooperativa Regiones que fue el adolescente quien les comentó que tenía una relación con una de las "tías" y que "aquí en la pieza nos damos besitos y abrazos".
El hecho fue informado verbalmente al director de la residencia en marzo, sin embargo, recién en junio se inició una investigación formal, luego de que llegara una denuncia del hecho al correo electrónico del director del recinto por parte de uno de los funcionarios.
La dirección regional del Sename en Aysén denunció el hecho a Fiscalía y puso a disposición los antecedentes del caso. La investigación está en manos del persecutor Luis Contreras Alfaro.
¿Se castiga al denunciante?
El 31 de mayo, el Tribunal Oral en lo Penal de Coyhaique condenó a uno de los menores residentes del centro familiar de Coyhaique por el delito de abuso sexual contra una educadora. El hecho ocurrió en enero de este año y la sentencia fue de libertad asistida.
Tras denunciar el hecho en Fiscalía, la funcionaria víctima de este abuso fue evaluada con una nota inferior a la que necesitaba para obtener un contrato definitivo y fue desvinculada.
La Asociación de Funcionarios del Sename (Afuse) cree que hay una relación entre la denuncia de la trabajadora y la decisión de no otorgarle el contrato. "El Sename en la Región de Aysén tomó, a nuestro juicio, la lamentable y repudiable decisión de dejar sin empleo a esta funcionaria, echándola y dejándola en la más absoluta indefensión", señaló el presidente regional de Afuse Aysén, Mauricio Muñoz Gatica.
Durante la investigación, el fiscal Luis Contreras hizo referencia a hechos de connotación sexual cometidos previamente por el mismo imputado, no constitutivos de delitos, que fueron presentados junto a la denuncia.
Un funcionario que sorprendió al menor en uno de estos hechos informó de la situación a la dirección del recinto, la que decidió iniciar un sumario administrativo contra el educador.
"Al final del día, el Sename termina persiguiendo a los trabajadores instruyendo sumarios administrativos, sumarios por hacer la pega", denunció el dirigente Mauricio Muñoz.
Consultado por estas situaciones, el seremi de Justicia de Aysén dijo que "aquel funcionario que se ve vulnerado en un derecho fundamental de índole laboral, debe hacer las denuncias correspondientes ante los tribunales, a fin de salvaguardar su derecho o garantía que puede haber sido violentada".
Según los funcionarios, es habitual encontrar elementos prohibidos en la casa. (Foto: ATON)
Drogas y procedimientos policiales
Otra de las situaciones relatadas por los trabajadores y ex trabajadores de la residencia familiar es el hallazgo habitual de elementos prohibidos en la casa, como drogas o cuchillos.
Según fuentes conocedoras de la realidad del recinto, estos hechos no son notificados a autoridades o la policía y muchas veces estos hallazgos no traspasan las paredes de la residencia.
"Aquí hay circulares y protocolos y dentro de los lineamientos técnicos, cualquier funcionario que detecte elementos prohibidos, debe hacer la denuncia ante la autoridad correspondiente", enfatizó el seremi de Justicia.
Según un oficio de Carabineros, entre su inauguración el 21 de octubre pasado y el 25 de marzo de 2019, se generaron 122 concurrencias de la policía uniformada a la residencia del Sename de Coyhaique por diversos procedimientos, pero ninguno de ellos por drogas o porte de armas.
Lanzaron una pistola al patio del vecino
Según un informe de la Municipalidad de Coyhaique, son varios los elementos que aparentemente no fueron tomados en cuenta para decidir el lugar para instalar la residencia.
"Los muros de la familia colindante (a la residencia) no cuentan con la altura necesaria para evitar objetos lanzados desde la sede. En razón a esto se han encontrado botellas, latas de cervezas, colillas de cigarro y una pistola", indica el documento.
Se agregan otros factores de riesgo como "la cantidad de botillerías que hay en el lugar (...) es de presumir que para llevar a cabo la intervención que Sename quiere lograr, el establecimiento debería estar ubicado en el lugar más idóneo".
Por esto, los vecinos solicitaron la reubicación de la residencia a través de un recurso de protección, que fue rechazado tanto por la Corte de Apelaciones como por la Suprema.
"Yo no estoy en contra de la reinserción de los jóvenes", afirmó a Cooperativa Regiones Ernesto Heitzer, quien oficia como vocero de la comunidad. "En el fondo, el recurso de protección era una lucha de David contra Goliat porque el Sename también depende de Justicia", señaló.
La casa de Heitzer, colinda con la residencia de vida familiar y él asegura que esto ha generado un impacto en la comunidad. "Una vecina se tuvo que ir de aquí. Se fue a vivir con su hija porque ella sufre de crisis de pánico, entonces constantemente le tiraban palos de leña y ropa sucia con excrementos arriba del techo", afirmó el vecino.
Prácticamente ninguno de los menores asistía de manera regular a clases. (Foto: ATON)
Deserción escolar
En Coyhaique el establecimiento tiene 15 cupos para adolescentes, quienes deben asistir a instituciones de educación. En el recurso de protección interpuesto por los vecinos del centro, se solicitó información a los liceos y centros de estudios, con lo que se constató que hasta el mes de junio, prácticamente ninguno de ellos asistía de manera regular a clases.
De acuerdo a un informe enviado a la Corte de Coyhaique por uno de los planteles requeridos, "en cuanto al rol del apoderado y compromiso de este, la Residencia presentó frente al establecimiento múltiples profesionales en este rol, no existiendo claridad de a quién se le asignaba finalmente la responsabilidad de poder responder frente a emergencias o contingencias ocurridas en el establecimiento, en beneficio del bienestar de los estudiantes".
El mismo informe señala que hubo una citación el día 3 de abril, "a la cual no acude el apoderado, sin presentar justificación de su inasistencia".
¿Quién es el encargado de cumplir con el rol de apoderado de un menor residente de estos centros? El seremi Eugenio Canales respondió que "el director de esta residencia es el encargado del cuidado y protección de estos niños, niñas y adolescentes que ingresan a una residencia. Él es el adulto responsable final".
El informe citado indica que nunca fue posible coordinar una entrevista presencial con el director del recinto del Sename.
Las respuestas del Sename
Este lunes, Cooperativa Regiones tomó contacto con Felipe Paredes, director de la residencia de vida familiar, para conocer su versión sobre los hechos relatados. Sin embargo, declinó referirse a ellos, indicando que la vocería corresponde a la directora regional del Sename.
La oficina de comunicaciones del Sename, tras ser requerido por este medio, indicó que la institución no entregaría su versión hasta después de publicado este reportaje.
Tras la breve conversación sostenida con el director de la residencia, a las 15:00 horas de este martes, y a través de un correo electrónico enviado a los trabajadores de la residencia, Paredes indicó que solo permanecerá durante esta semana en el cargo, ya que la Dirección Nacional del Sename le solicitó asumir nuevos desafíos profesionales en la Unidad de Diseño y Planificación del Servicio.
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