El 61 por ciento de los menores de edad consume alcohol y el 23 por ciento estupefacientes.
Desde el Sename plantean la importancia de trabajar junto a las madres para la superación de la pobreza.
Las regiones con mayor consumo son la Metropolitana y de Antofagasta.
El segundo informe del Observatorio Niñez y Adolescencia, dado a conocer esta semana, mostró que uno de cada cuatro menores de 18 años en Chile vive bajo la línea de la pobreza.
El estudio también destacó la prevalencia del consumo de alcohol, que llegó a 61,4 por ciento. Esto implica que seis de cada 10 niños, niñas y adolescentes manifestaron haber consumido alcohol en el último año.
En tanto, el 23,1 por ciento -casi uno de cada cuatro- declaró haber consumido alguna droga, siendo las regiones con mayor prevalencia Antofagasta y la Metropolitana, con tasas de 27,6 y 27,4 por ciento respectivamente.
En contraste, anotaron las cifras más bajas de consumo de droga las regiones de Los Lagos (16,3 por ciento) y Maule (16,7 por ciento).
A la luz de estos números el director del programa de Bioestadística de la Escuela de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, Jorge Rodríguez, planteó la importancia de "generar un indicador de gravedad de la droga".
"El alcohol es un elemento que favorece la socialización de los grupos, entonces, la explicación que uno tendría que analizar del alcohol, más que el alto porcentaje de niñitos que lo consumen, es la gravedad del consumo", dijo Rodríguez.
"Cuando tú estás tratando de analizar la gravedad significa que estás hablando de frecuencia y cantidad", planteó el investigador, que también apuntó a un cambio cultural tras el aumento del consumo de marihuana entre escolares durante los últimos años.
Sociedad en deuda
Según señaló el informe, "las desigualdades estructurales que reproduce la sociedad chilena obligan al 22,8% de los NNA (niños, niñas y adolescentes) a experimentar condiciones de pobreza y pobreza extrema. Esto pone en entredicho la posibilidad de que lleguen a desarrollar plenamente todas sus capacidades para una vida digna e independiente en sociedad".
Daniela Díaz, académica e investigadora de la Universidad Central que participó en el estudio, señala que la conclusión principal de la investigación se relaciona con el establecimiento de brechas territoriales.
"Tenemos buenas cifras país respecto de la infancia, pero cuando uno desagrega esas cifras por sexo, por territorio y mira lo que está ocurriendo en distintos temas –como salud y educación- en las regiones, las cifras de las regiones dan cuenta de situaciones importantes de vulneración de los derechos de los niños", comentó Díaz.
La representante de Unicef para Chile, Hai Kyung Jun, dijo ayer a Cooperativa que el informe del Observatorio señala que "tal vez Chile no es lo que se ve de afuera".
"Sería una pena es que mirando a las estadísticas de crecimiento positivas de Chile nos perdamos los detalles que hay en esas estadísticas. Si el crecimiento no beneficia a la población igualmente, entonces hay algo que la sociedad le debe a esos niños", advirtió.
La visión del Sename
El estudio también señaló que siete de cada 10 niños son maltratados por algún integrante de su familia, y si bien disiminuyeron las tasas de violencia intrafamiliar, aumentaron las de violencia sexual, sobre todo en la Región Metropolitana: hay casi 219 víctimas por cada 100 mil habitantes, pero esto sólo según las denuncias efectuadas ante Carabineros.
La directora del Sername, Marcela Labraña, afirmó que en el organismo se está trabajando en políticas públicas integrales que cuiden a los niños pero, adicionalmente, se preocupen de la situación de sus madres.
"Uno no puede trabajar con la niña o el niño en forma aislada. Cuando un niño es agredido, expuesto a violencia o pobreza, siempre hay una mujer delante o detrás de estos niños", dijo Labraña.
La funcionaria indicó que el Sename está impulsando "una forma súper concreta de trabajar en forma coordinada con el Sernam, en el área de salud" en pos de "una política pública que le dé prioridad a nuestros niños y niñas".
