La Defensoría de la Niñez emplazó al Gobierno a cumplir sus "compromisos" para proteger las infancias y adolescencias en medio de la crisis de seguridad, luego de que un adolescente de 17 años fuera asesinado y sus dos hermanos, de 13 y 11, resultaran heridos producto de un tiroteo del que fueron víctimas y que incluyó 150 disparos en el sector Bajos de Mena, en la comuna de Puente Alto.
El defensor Anuar Quesille anunció la presentación de una querella por el delito de homicidio. Sin embargo, advirtió que la acción penal, como herramienta que entrega la ley para "esclarecer los hechos y establecer las responsabilidades pertinentes", resulta a todas luces "totalmente tardía para recuperar la vida del adolescente víctima".
En ese sentido, urgió a las autoridades a tomar medidas que prevengan estos crímenes y protejan a los menores de edad.
"Es urgente visibilizar a la niñez y adolescencia en la discusión en torno a la crisis de seguridad pública. Nosotros como institución, en un rol intermediador, hemos realizado una serie de recomendaciones al Gobierno en esta materia, hemos convocado anteriormente, y de manera transversal, a alcaldes, parlamentarios y a autoridades de Gobierno, para generar un trabajo conjunto y además preventivo, pero este tema ya no resiste más discusión ni diagnósticos, porque estos ya están hechos: ahora se requiere materializar los compromisos públicos, por parte del Gobierno y las autoridades competentes, de manera urgente", expuso Quesille.
Remarcó que "se debe robustecer una agenda de seguridad específica para los niños, niñas y adolescentes del país", y recordó al respecto que "la presentación de una estrategia en concreto y que fuera comprometida por el Gobierno, busca precisamente evitar muertes de niños, niñas y adolescentes, respondiendo a las reiteradas recomendaciones de la Defensoría de la Niñez".
Pero "ésta fue anunciada a principios del mes de junio y lamentablemente aún no opera", cuestionó Quesille, recriminando que "da cuenta de una demora inaceptable, lo cual hace que sigamos lamentando afectaciones a los derechos de la niñez y adolescencia producto de la crisis de seguridad".
El defensor de la Niñez sostiene que se necesitan medidas que vayan más allá de la persecución penal cuando se trata de la protección de los niños, niñas y adolescentes (NNA), y que éstas deben contemplar políticas públicas urgentes y concretas, así como otras de largo plazo, con el propósito de crear "entornos protectores y seguros" para estos.