La Asociación de Magistrados y el Movimiento de Liberación Homosexual (Movilh) acusaron amedrentamiento contra un juez suplente que autorizó el cambio de sexo en la partida de nacimiento de un menor transgénero de cinco años y por ello enfrenta una querella criminal por "prevaricación", presentada por la ONG conservadora Comunidad y Justicia.
Luis Fernández Espinoza, de 70 años, secretario titular del Séptimo Juzgado Civil de Santiago, ejercía como magistrado suplente cuando acogió la solicitud de los padres para rectificar el nombre y el sexo del menor.
Desde la Asociación de Magistrados explicaron que en esta materia hay instrumentos y tratados internacionales que también se consideran al momento de interpretar la ley.
"Si alguien se siente agraviado por cualquier decisión judicial, el mecanismo adecuado son los recursos procesales. Pero esto otro, me temo que pudiera tener por objeto inhibir o amedrentar a jueces que se hagan cargo de este tipo de temas que hoy están arriba de la palestra", indicó el vocero Eduardo Gallardo.
Movilh criticó a "grupo de fanáticos conversadores"
El juez Fernández será representado por el equipo jurídico del Movilh, cuyo dirigente Rolando Jiménez dijo que la acusación fue levantada por un grupo de fanáticos que ya habían presentado una serie de querellas en contra de la comunidad gay.
"Lo que hizo el juez fue aplicar un criterio que están aplicando hace rato otros jueces. Esto, insisto, es un intento de amedrentamiento brutal en contra de un juez de la República solo por razones ideológicas de un grupo de fanáticos conservadores", acusó.
A su vez, el abogado de la organización, Jaime Silva, destacó que estas situaciones no ocurrirían si existiera una ley de identidad de género.
Manifestó que "lo que se pretende con la ley de identidad de género es precisamente evitar ese criterio, esa subjetividad que muchas veces va manchada de principios valóricos".
ONG insiste que los jueces no son legisladores
El abogado Tomás Henríquez, director de la ONG Comunidad y Justicia, que promueve los derechos humanos desde una visión antropológica judeocristiana, acusó prevaricación y dijo que los jueces no son legisladores, pues en Chile no hay una ley que reconozca la identidad de género.
El jurista explicó que "es la propia Asociación Americana de Siquiatría la que ha señalado que respecto de aquellas situaciones en los que existen niños que tienen confusión o manifiestan confusión respecto de su identidad sexual, en la inmensa y abrumadora mayoría de los casos van a superar esa confusión antes de llegar a la adolescencia".
Esta discusión se da cuando la Comisión de Derechos Humanos del Senado despachó al Senado el proyecto de identidad de género, pero sin la opción de que los menores de edad puedan cambiar su nombre y sexo registral.
Eso sí, en la Cámara de Diputados se aprobó un proyecto de derechos de la niñez que incluye la identidad de género.