El defensor nacional Andrés Mahnke entregó la cuenta pública de la Defensoría, la que reveló que en 11 años se ha duplicado la aplicación de la prisión preventiva, medida cautelar en la que un juez manda a la cárcel a un imputado por un delito mientras se realiza la investigación del caso.
Según las cifras que presentadas, en 2006 la medida se decretó 15.369 veces, mientras que durante el año pasado se aplicó en más de 30 mil oportunidades.
Mahnke ha dicho que el uso de la prisión preventiva "se está empleando como una condena anticipada", lo que contribuye a loa sobrepoblación y hacinamiento de internos en las cárceles, publicó Las Últimas Noticias.
Desde la Asociación Nacional de Fiscales, en tanto, refutaron esta posición. La presidenta del gremio, Trinidad Steinert, explicó que cuando un persecutor pide la medida cautelar, lo hace siempre cuando se acreditan la participación del imputado en el delito y cuando la libertad de esa persona configura un peligro de la sociedad.
"No (es una pena anticipada), los fiscales la piden para resguardar los principios establecidos por el legislador. Si una persona comete un delito de robo con intimidación y es reincidente, obviamente debemos pedir la prisión preventiva porque sino se provocaría un efecto perverso de que no estaríamos haciendo nuestra pega. El trabajo de los fiscales es solicitarla cuando se dan los presupuestos legales.
Steinert agregó que el aumento de decretos de la medida cautelar se puede contextualizar en la mayor cantidad de causas que investiga el Ministerio Público. Así, la fiscal explica que se comenzaron a tratar nuevos delitos como el de maltrato habitual enmarcado en la violencia intrafamiliar y los relacionados a la reforma de responsabilidad penal adolescente.
En su ponencia, Mahnke también destacó que más de 322 mil causas ingresaron al sistema judicial en 2017, de las cuales 47 mil fueron declaradas inocentes o no condenadas.