"El hacinamiento de las cárceles, en relación a la nueva delincuencia y a factores también migratorios, es una bomba de tiempo", advirtió este lunes el exdirector nacional de Gendarmería (2018-2022) Christian Alveal.
El uniformado conversó con Una Nueva Mañana de Cooperativa tras conocerse la proyección de la institución sobre la población penal para el próximo año, que alcanzaría los 50.000 reos, poco más de 8.000 por sobre la capacidad actual del sistema.
"Se van a aumentar las plazas en las cárceles concesionadas. Hablaron de 9.000 plazas. Eso significa aumentar las camas en las celdas, pero ningún centímetro de patios, de talleres, de áreas técnicas. ¿Qué significa eso? Que a mayor cantidad de internos en espacios más reducidos, con una delincuencia cualitativamente más compleja, más problemas de violencia carcelarias, de sometimiento y de abuso... Ésa no es la solución", dijo Alveal.
En el marco de la discusión de la agenda de seguridad en el Congreso, el exdirector afirmó que le "alegra que, por parte de algunas autoridades, esté mencionada Gendarmería en el contexto de cómo enfrentar esta nueva delincuencia. Antes no era habitual y la lucha contra ese flagelo estaba sólo en las calles. Nadie percibía que los esfuerzos y la mayor eficiencia de los entes persecutores penales va a impactar directamente en las cárceles y uno a veces se preguntaba si (las autoridades) tenían conciencia de que las cárceles se estaban transformando en bodegas humanas".
Alveal sostuvo además que "no es la extensión de la condena lo que va a ser realmente disuasivo para poder romper la reincidencia delictual, sino el régimen asociado a la condena, que, por lo demás, es más económico y más efectivo".
Ese "es el punto que debiese debatirse e implementarse a la brevedad. De eso, nadie discute nada todavía", señaló.
En tal sentido, planteó que "las personas que son altamente violentas, incluso con los mismos privados de libertad, debiesen tener regímenes mucho más estrictos que la delincuencia común, sobre todo aquellos relacionados con grupos organizados, que lideran bandas criminales".
Según Gendarmería, actualmente hay 46.200 presos en el país, mientras que la capacidad carcelaria es de 41.762, por lo que hay un uso del 110,6% de los recintos penales.