Se requiere "un régimen diferenciado para que estos reclusos corten contacto con el mundo exterior y los centros penales dejen de ser su centro de operaciones", dijo a Cooperativa el comandante Mario Benítez.
El líder de ANOP afirmó que "la tasa de fuga de Gendarmería es muy baja".
El comandante Mario Benítez, presidente de la Asociación Nacional de Oficiales Penitenciarios (ANOP), abordó este lunes la crisis que enfrentan las cárceles del país por la alta ocupación y la necesidad de construir nuevos recintos, los que, además, deben tener una "habilitación especial" para reclusos por crimen organizado.
En entrevista con El Diario de Cooperativa, Benítez afirmó que "es una realidad" la necesidad de más cárceles en el país por la sobrepoblación penal y las medidas anunciadas durante los últimos días, entre ella la solicitud de prisión preventiva por parte de fiscales en contra de extranjeros que sean detenidos y que no cuenten con su cédula de identidad, dado que estas -aseguró- "van a tener un gran impacto en el sistema penitenciario".
De todas maneras, advirtió que no solamente se deben construir recintos penales, sino que hay que revisar "otro tipo de evaluación penal", dado que "no estamos hablando del delincuente que nosotros normalmente teníamos, aquí estamos hablando de crimen organizado".
"Hay que tener cárceles especialmente habilitadas, para que este tipo de reclusos corten el contacto con el mundo exterior y para que los centros penales dejen de ser el centro de operaciones del crimen organizado", puntualizó el líder de ANOP, que advirtió también que en esos casos se necesita que los presos tengan "un régimen diferenciado".
"No podemos otorgarle el mismo tratamiento a un interno primerizo o alguien que está en vías de reinsertarse, versus estos internos que pertenecen al crimen organizado. Estamos enfrentando un riesgo mucho mayor del que nosotros conocíamos", profundizó el comandante a Cooperativa.
Por otra parte, Benítez analizó uno de los crímenes que más repercusión ha generado al país en las últimas semanas, el asesinato de la carabinera Rita Olivares, en el que hay involucrados delincuentes que habían escapado de la cárcel de Valparaíso.
"Se producen fugas en todas las cárceles del mundo, así que nosotros no estamos exentos", señaló el presidente de la ANOP, quien alertó también que en varios casos "los presupuestos para mantener los recintos son muy bajos".
De todas maneras, aseguró que "la tasa de fuga de Gendarmería es muy baja" y que aunque se piense que "a lo mejor 12-15 fugas desde un recinto en el año son muchas", es necesario analizar también que "la cantidad de sujetos que circulan por el sistema penitenciario es muy alta".
Finalmente, destacó que los protocolos y procedimientos usados en la actualidad "se pueden revisar", sobre todo en los casos de escape de internos.
"El personal de Gendarmería informa inmediatamente al Ministerio Público, a Carabineros y a la Policía de Investigaciones, que son los autorizados por ley para poder recapturar a los reclusos. Gendarmería no puede salir de los recintos a buscar a quienes se fugan porque no está dentro de las facultades legales", explicó sobre la situación actualizar.
Ante esto, solicitó que se pueda establecer "una alianza o un protocolo más definido y más oportuno para recapturar a aquellos que se fugan de los centros penitenciarios".
