Eugenia Riffo prestó declaraciones ante el fiscal a cargo del caso este miércoles.
Señaló que un médico le prescribió sibutramina y otros remedios.
La parvularia Eugenia Riffo, quien olvidó en su automóvil al pequeño Borja López, lo que le causó la muerte, reconoció el consumo de medicamentos, pese a que siempre lo negó.
La mujer, formalizada por homicidio por omisión, prestó declaración este miércoles ante el fiscal a cargo del caso, José Morales, y señaló que "entre enero y febrero estuve en tratamiento con sibutramina y otras que me mandaba a preparar de recetas magistrales a Farmacias Ahumada", según Chilevisión.
Además, un mes antes del fatal hecho, ocurrido en agosto, también consumió sibutramina, un potente elemento contra la obesidad, que puede afectar el ánimo, dependiendo de la persona.
"En julio fui al doctor y me recetó nuevamente pastillas, me recetó sibutramina y otras que me mandaba a preparar que según me dijo eran para control. En esta oportunidad tomé ambas pastillas hasta una semana después del 18 de septiembre", señaló en su declaración.
La próxima semana se efectuará la reconstitución de escena del caso.
