La defensa del ex carabinero Sebastián Zamora, acusado de empujar a un adolescente de 16 años desde el Puente Pío Nono hacia el Río Mapocho en medio de una protesta en la Plaza Baquedano el 2 de octubre del 2020, busca pruebas en el rugby para justificar un choque tipo "tackle".
El abogado defensor del ex funcionario -imputado como autor del delito de homicidio frustrado-, Alejandro Peña, detalló en El Mercurio las pruebas e informes que están buscando demostrar que no hubo dolo en su actuar, sino una mala ejecución que terminó con un violento choque.
Uno de los informes -explicó Peña- es uno "gesto-motor" que analiza la contextura física de ambos y los movimientos del cuerpo humano "elaborado por un seleccionador de rugby que establece que Zamora efectúa un movimiento de reducción y agarre y no de empuje".
Otra de las diligencias es un informe técnico de "ingeniería estructural que analiza las condiciones de la baranda del puente y la somete a un análisis comparativo con normas de viabilidad y establece que dicha baranda está bajo la norma en 30 centímetros", agrega la defensa.
Asimismo, se aportará un análisis de la normativa del manual de procedimientos que "establece que Zamora se ajustó a toda la reglamentación y siempre actuó en el cumplimiento de su deber", dijo Peña, agregando que se tomarán en cuenta videos de la conducta del menor en la manifestación, quien habría agredido a carabineros y por eso se justificaría su detención.
"En la especie no se configura el delito al no reunirse todos sus requisitos. Nosotros en principio creemos que tiene una causal de justificación al actuar en el cumplimiento del deber en el ámbito de sus funciones de acuerdo a las órdenes que recibió", declaró el ex fiscal Peña.
A la investigación se suma una declaración de casi cuatro horas de Zamora ante la fiscal Ximena Chong, también del menor y de testigos que estuvieron en el lugar, además de videos y audios del momento en que sucedió el hecho.