Este jueves comenzó el juicio contra Ignacio Montecinos Pinto, imputado por el delito de robo con homicidio frustrado contra Pablo Ramírez Aria, cajero del Servipag que fue quemado vivo en la comuna de Hualpén, Región del Biobío, en 2015.
El sujeto es el único acusado que se mantiene con vida, luego de la muerte de su hermano Jorge Montecinos Pinto, el otro detenido, tras una riña en la cárcel de Chillán, en julio pasado.
El fiscal de la causa, Julián Muñoz, convencido de la culpabilidad de Montecinos, expresó que "si la Fiscalía ha llegado a esta instancia es porque al curso de la investigación ha llegado a un cúmulo de antecedentes, todos verificados, que establecen su autoría".
Ley de Responsabilidad Adolescente
Ignacio Montecinos era menor de edad cuando fue detenido, por lo que se le juzgará bajo la Ley de Responsabilidad Adolescente. Enrique Hernández, abogado de la familia de la víctima, advirtió que solicitará los 10 años de cárcel con régimen cerrado, la mayor pena que contempla la ley en estos casos, y una indemnización de 90 millones de pesos.
Silvia Ramírez, hermana del cajero afectado, espera "que si efectivamente es culpable o uno de los culpables, que él (el imputado) esté en una régimen cerrado y ojalá que sea el máximo de pena que piden los abogados".
Serán 60 testigos los que se presentarán y tres semanas de juicio, para cerrar el emblemático caso.