El Ministerio Público entregó detalles de los compromisos adquiridos este viernes entre las fiscalías y policías de Latinoamérica en el encuentro multilateral en Brasil sobre los alcances regionales del caso de corrupción conocido como Lava Jato.
En la cita, el fiscal nacional, Jorge Abbott, la jefa de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Centro-Norte, Ximena Chong, y el jefe de la Unidad de Cooperación Internacional y Extradiciones, Antonio Segovia, tuvieron una reunión clave con el procurador general de Brasil, Rodrigo Janot.
Esta reunión, en busca de agilizar el proceso en una de las aristas de la investigación relacionada a la constructora OAS y el eventual financiamiento de campañas políticas chilenas.
Abbott declaró al término de la cita que la corrupción "es un delito que como Ministerio Público nos preocupa particulamente por los graves efectos sociales que arrastra, dado los daños nefastos que puede provocar tanto en la calidad de vida de las personas como en la seguridad pública y en la economía, tanto nacional como regional".
En el encuentro que "tuvo un alto espíritu de colaboración", se logró "poner en marcha una alianza latinoaméricana anticorrupción", donde "vamos a usar todos y cada uno de los mecanismos de cooperación que nos provee nuestra legislación y los tratados internacionales", destacó el prosecutor.
"Pudimos tratar tantos temas expecíficos de las investigaciones, como generales de cómo seguir cooperando, y con ese objetivo acordamos agilizar los mecanismos de respuesta tanto de las solicitudes que han llegado al Ministerio Público como eventuales nuevas peticiones" agregó Abbott.
Gracias a esto, se facilitará la presencia de fiscales y policías chilenos en las declaraciones u otras diligencias y comprometió la pronta entrega de cualquier antecedente que pueda ser útil para la investigación que lleva tanto Brasil como cualquier otro país de Latinoamérica.
Tras la cumbre multilateral, los fiscales de los 11 países presentes emitieron una declaración conjunta en que se comprometieron a lograr las más amplia y rápida y eficaz cooperación internacional para desmantelar la corrupción transnacional.