Colegio lo identificó como consumidor y vendedor de marihuana.
Post en Instagram fue la prueba que el establecimiento presentó a la familia.
La Corte de Apelaciones de Santiago acogió un recurso de protección a favor de un joven que en 2015 cursó tercer año medio en el Colegio del Verbo Divino, luego que el colegio católico lo sancionara por -de acuerdo al establecimiento- consumir, promover y vender marihuana.
A raíz del "problema" y por haber "pasado el límite", el Verbo Divino informó a los padres que se cancelaba la matrícula para el año 2016.
La prueba del colegio era la red social Instagram, donde el alumno había posteado imágenes suyas liando tabaco -cuyo consumo estaba en conocimiento de su familia- junto a una calcomanía de una tienda donde se venden productos para el cultivo de la yerba.
Según detalla The Clinic Online, los padres del menor reclamaron ante la dirección, con más énfasis luego de que 2 exámenes de orina constataran que no existía consumo de marihuana.
Fue a comienzos de septiembre de 2015 cuando el Verbo Divino acusó al alumno, a mediados del mismo mes hizo una "extensión de la investigación" y a pesar de las prueba toxicológicas negativas se confirmó la sanción: cancelación de matrícula.
Luego, en octubre, la familia fue informada de una nueva medida: la condicionalidad del alumno, sujeta a la revisión del caso a mediados de este año.
Como consideraban que el procedimiento del colegio era viciado en forma y fondo, los apoderados del joven recurrieron a la justicia, siendo respaldados por la primera sala del tribunal de alzada, donde las juezas Dobra Lusic, Dora Mondaca y Jenny Book ratificaron que se trató de un procedimiento incorrecto, de fundamentos errados y en el que no hubo presunción de inocencia.
