El parlamentario envió un correo a Gendarmería con información médica del papá del senador Macaya, condenado por abuso sexual de menores.
El militante UDI descartó haber cometido dicho delito, explicando que él no pidió nada a cambio.
El diputado UDI Jorge Alessandri declaró este jueves ante la Fiscalía de Alta Complejidad de Rancagua, en calidad de testigo, en el marco de una investigación por presunto tráfico de influencias a beneficio del condenado Eduardo Macaya Zentilli.
Según se detalló, el parlamentario opositor envió un correo electrónico al alcaide de la cárcel de Rancagua, centro penitenciario en el que se encontraba cumpliendo prisión preventiva, por abuso sexual de menores, el agricultor y padre del extimonel UDI Javier Macaya.
Durante esta jornada, por cerca de una hora, Alessandri declaró ante el persecutor Javier Von Bischoffshausen para explicar por qué envió dicho correo, en el que se detallaba información médica de Macaya Zentilli.
"Lo que me informan a mí es que (la información) se demora hasta el próximo día hábil en llegar. Y como esa persona se internaba cerca de las 10.00 horas, con el objetivo de que tuviera los remedios esa noche, yo hago esta gestión que me pide directamente el hijo del condenado y pensando él, tanto Javier Macaya como yo, que la información formal llegaba al día siguiente. Esto fue muy cerca del fin del día hábil, a las 6.40 pm", se defendió el militante UDI.
Asimismo, descartó que hubiera un tráfico de influencias en esta acción: "de ninguna manera, y además lo más importante que nos exhibió ahí los artículos, el fiscal, es que no hay una petición. Se dice remito antecedentes médicos. En el tráfico de influencias usted tiene que pedir algo. Esa es la diferencia. Por eso me cita como testigo", puntualizó.
Por su parte, el persecutor Von Bischoffhausen, detalló que lo que se está investigando "es si es que hubo influencias respecto a funcionarios públicos, en este caso, Gendarmería de Chile, (y sí) como consecuencia de aquello, hubo privilegios respecto a algún interno".
"Esto es importante que lo entienda la comunidad: en Chile, para que se configure el delito (de tráfico de influencias) se requiere, además, algún tipo de beneficio obtenido por los funcionarios públicos, en este caso, por Gendarmería", analizó el fiscal.
Debido a esto, indicó que "estamos investigando si es que eso se hace de la manera correcta y de la misma forma en que cualquier chileno o ciudadano o persona privada de libertad en Chile las tiene y si es que eso no se cumplió, si es que fue a cambio de algún beneficio".
Cabe recordar que por este caso hubo un sumario de Gendarmería por presuntos privilegios a Macaya cuando estuvo en enfermería, y hay tres funcionarios públicos en calidad de imputados.
