Este lunes se concretó la anunciada acción de diputados oficialistas en pos de la remoción del fiscal regional de Coquimbo, Patricio Cooper.
Un total de 10 parlamentarios -tres del Partido Comunista, una de Acción Humanista, tres del Frente Amplio, dos del Partido Socialista y una de la bancada del PPD- firmaron e ingresaron vía online, a la Corte Suprema, una solicitud de remoción del persecutor que investiga el caso Sierra Bella y el presunto tráfico de influencias que involucra a Karol Cariola.
El escrito tiene tres capítulos: el primero y el segundo invocan normas constitucionales y legales; y en el tercero se detallan los elementos fácticos que, a juicio de los legisladores, configuran una "negligencia manifiesta por omisión" de Cooper en lo relativo a la solicitud de autorización y a la ejecución del allanamiento a la residencia de Cariola, el mismo día que dio a luz a su primogénito.
Los parlamentarios señalan que el informe que entregó Cooper a la jueza que autorizó el procedimiento contiene errores, no alcanza los estándares jurídicos requeridos y, además, hacen presente que al domicilio de Cariola llegó la prensa antes que la PDI.
Los congresistas acusan también "negligencia manifiesta y culpable" de Cooper en el manejo de la reserva del contenido de las investigaciones respecto de Irací Hassler, con la consecuencia de su filtración hacia los medios de comunicación y hacia la opinión pública.
"No es posible permitir que un fiscal regional altere y deforme la naturaleza autónoma del Ministerio Público, utilizándola para actuar solapadamente -y lo digo con toda responsabilidad- en operaciones políticas en perjuicio de un sector", argumentó la diputada PC Carmen Hertz, que lidera la ofensiva.
La abogada hizo ver que "el fiscal Cooper le entrega al alcalde Desbordes el famoso informe 487 que elaboró la PDI, informe que está tarjado, porque por decisión del tribunal, hay una serie de chats que no tienen relevancia alguna para las materias que se están investigando. Curiosamente, la querella que interpone el señor Desbordes, en su número 17, es copia textual de la página 185 de este informe, que estaba tarjado, que se supone que no debía conocerlo".
El socialista Juan Santana -otro de los firmantes- sostuvo que este pedido de remoción también "tiene como objetivo trazar un precedente para evitar que se produzcan este tipo de vulneraciones en investigaciones futuras".
"Acá no solamente estamos hablando de filtraciones de chats, sino que también vulneraciones a normas aprobadas por este propio Congreso Nacional y a normas suscritas por nuestro país en el plano internacional, y que tienen como objetivo dignificar y defender la condición de las mujeres, sobre todo en una circunstancia tan compleja como lo es un parto", dijo Santana.
En paralelo -coincidencia o no- el fiscal Patricio Cooper remitió este mismo lunes al Consejo de Defensa del Estado una copia de la investigación contra Cariola y Hassler, para que el organismo evalúe posibles acciones penales respecto a esta arista de tráfico de influencias.
Karol Cariola dejó de presidir la Cámara Baja
En tanto, la Sala de la Cámara Baja aceptó este mismo lunes la renuncia a la presidencia que anunció Cariola el 16 de marzo.
Ni siquiera fue necesario votar: se preguntó al inicio de la sesión si había acuerdo para aceptar la dimisión, y ésta fue aceptada de manera unánime.
Desde ese mismo momento, y por próximas dos semanas, hasta el 7 de abril -cuando sea elegido quien sucederá a Cariola en la testera-, será el primer vicepresidente, Gaspar Rivas, quien asuma formalmente el cargo.
"Soy la primera militante del Partido Comunista de Chile que ostenta tan alta magistratura, lo cual me llena de orgullo y me permite comprender por qué existen fuerzas tan determinadas a manchar y ensuciar lo que transversalmente ha sido reconocido como impecable", dijo Cariola en una declaración que difundió tras cesar, de la manera descrita, su mandato.
