El querellante Eduardo Contreras calificó el rechazo al desafuero del senador UDI como "una gran derrota para el sistema democrático chileno".
A las presiones que recibió la Corte de Apelaciones de Santiago atribuyó el abogado Eduardo Contreras, querellante en el caso Operación Cóndor, el rechazo a la solicitud de desafuero en contra del senador UDI Sergio Fernández, por su presunta responsabilidad en las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la dictadura, de la cual fue ministro del Interior en dos períodos.
"Creo que lo de hoy es una gran derrota para el sistema democrático chileno", dijo el jurista, quien lamentó que aunque se presentaron numerosas pruebas de la relación de Fernández con los crímenes del régimen militar, el tribunal de alzada no acogió la petición.
Para el abogado, "un poder del Estado, el Poder Judicial, no se ha podido sustraer al influjo de las presiones políticas", argumentó.
Sin embargo, destacó que el fallo de 13 votos contra 11 implica que hay "una buena mayoría de ministros considera que sí es culpable y que sí había que procesarlo", por lo que apelará ante la Corte Suprema para lograr el desafuero del congresista.
En tanto, Omar Matus, defensor de Fernández, celebró la resolución que prueba "la inocencia absoluta del parlamentario".
"Esto significa además que en definitiva este proceso termina con el sobreseimiento del senador Fernández", expresó Matus, quien enfatizó que "lo que importa en las resoluciones es el resultado final, y en definitiva lo que aquí ha pasado es que se ha rechazado el desafuero independiente de la votación que se ha producido".
Según el profesional, las acusaciones contra el representante de la Unión Demócrata Independiente (UDI) por la Duodécima Región sólo son fruto de una "maniobra política".
