La ex guerrillera francesa Marie Emmanuelle Verhoeven, alias "comandante Ana", ex integrante del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, concluyó la huelga de hambre iniciada hace dos semanas al conocer que un tribunal indio decretó su libertad bajo fianza, mientras continúa el proceso de extradición a Chile por su supuesta participación en el crimen de Jaime Guzmán, en 1991.
"Está muy, muy feliz. Ha roto el ayuno", afirmó a la agencia EFE la abogada de Verhoeven, Ramni Taneja, instantes después de hablar por teléfono con su defendida, quien está presa en una cárcel de Nueva Delhi.
La "comandante Ana", que sobrevivía únicamente a base de agua y limonada, tomó la decisión de iniciar su protesta después de que el Gobierno indio anunciara que trataría de dejar sin efecto la última de sus peticiones de libertad bajo fianza, tras 16 meses bajo arresto.
Sin embargo a última hora de la tarde de ayer, el tribunal de primera instancia que juzga a la ex frentista en la capital india decretó su libertad, al tiempo que detalló ciertos condicionantes a los que deberá atenerse.
Según la decisión, a la que tuvo acceso EFE, la cantidad fijada como pago de la fianza es de un millón de rupias (unos 15.000 dólares), además deberá presentarse ante el juez el segundo y el cuarto lunes de cada mes, entregar su pasaporte al tribunal, no salir de Nueva Delhi sin permiso y obtener una dirección fija en la capital.
La abogada explicó que espera poder recaudar el dinero solicitado lo antes posible "para que el lunes o a lo más tardar el martes" Verhoeven, de 56 años, pueda salir en libertad.
Proceso de extradición
La decisión se conoce ad portas de que, el próximo 8 de julio, se retome el juicio por el proceso de extradición a Chile abierto contra la "comandante Ana", y que podría prolongarse durante "un mínimo de tres o cuatro meses más", por lo que la abogada pidió a la ex guerrillera que "recupere fuerzas".
"Queda una gran batalla por delante", señaló Taneja.
Verhoeven fue detenida en febrero del pasado año cuando entraba en la India desde Nepal en base a una alerta roja de la Interpol que ya había conducido a su arresto en Alemania un año antes, aunque Berlín decidió no extraditarla y la puso en libertad.
La detenida está acusada de haber participado en el asesinato del senador Jaime Guzmán, cometido el 1 de abril de 1991 en Santiago por el Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR).
En su objeción a la extradición, la ex guerrillera alegó ser "víctima de una venganza política" por parte del gobierno de Chile en represalia por "haber defendido valientemente los derechos de los presos" durante su estadía en el país, entre 1985 y 1995, cuando trabajó para la Administración Penitenciaria.
UDI criticó libertad
El diputado de la UDI, Issa Kort, se reifiró a la medida aplicada por Justicia para la ex frentista señalando que le "preocupa que se le conceda una libertad a una persona que teniendo tanto tiempo de reflexión en una cárcel detenida en India, no haya querido voluntariamente presentarse ante un tribunal chileno".
"¿Qué es lo que sabe ella, cuál es la información que tiene. Quién ha pagado su abogado todo este tiempo. Quién va a pasarle este millón de rupias?", sostuvo el diputado, agregando que para él, "el principal riesgo es que ella se fugue".
"Confío en la autoridad de la India, voy a pedir desde ya el mayor celo posible en saber dónde ella estará domiciliaria", concluyó.