El sociólogo explicó su apoyo al asilo político de Ricardo Palma Salamanca, pese a no estar de acuerdo con el crimen que cometió.
"Él conquistó su libertad con su huida", reflexionó.
"Escapar de la cárcel es un hecho que debiera ser respetado", afirmó el sociólogo y militante RD.
El Premio Nacional de Humanidades y Ciencias Sociales 2015, Tomás Moulián, explicó los motivos que lo llevaron a apoyar públicamente la solicitud de asilo político en Francia a Ricardo Palma Salamanca, pese a estar en desacuerdo con el asesinato de Jaime Guzmán, por el que éste fue condenado.
"Para mí el asesinato de Guzmán no tiene justificación. Sí lo tenía el asesinato, el magnicidio de Pinochet", dijo Moulián en una entrevista con La Tercera PM.
"Con la excepción de Pinochet, no estoy por ningún asesinato de quienes apoyaron a la dictadura", dijo el sociólogo, que aseveró comprender, no obstante, "qué está en la mente de quienes ejecutaron el asesinato".
"Ellos (pensaban que) estaban matando al segundo Pinochet. Al principal ideólogo de la dictadura", razonó: "Él es el principal ideológo de la dictadura, artífice de la Constitución del '80 y firme partidario de una dictadura larga; incluso se enfrenta a Manuel Contreras, porque le parece que las actividades de la DINA no generan condiciones para una dictadura larga".
Para Moulián, existía en la década de 1980 "un justificativo ético en intentar" el magnicidio de Pinochet, porque significaba "ajusticiar al principal responsable de los crímenes de la dictadura militar".
El académico -hoy militante de Revolución Democrática- señaló además que la época en la que ocurrió el crimen de Guzmán "permite comprender el ajusticiamiento", pero no justificarlo: "Fue en condiciones cuando existía en Chile un régimen semi representativo, con senadores designados, Consejo de Seguridad Nacional, el sistema binominal. Todo eso no cambia hasta el 2005".
"Se ganó su libertad, otra vida"
En este contexto, Tomás Moulián explicó que está en desacuerdo con la idea de una extradición de Palma Salamanca a Chile, porque "no hay condiciones para un juicio justo" y porque "si vuelve, vuelve a someterse a una sanción de presidio perpetuo".
"Yo creo que Palma Salamanca se ganó su libertad: huyó de la cárcel (...) Obtuvo su libertad, se mantuvo oculto bastante tiempo y se ganó otra vida, una bastante distinta a la que llevaba. Hoy Palma Salamanca es otro, no es el mismo que ajustició a Jaime Guzmán. Son muchos años durante los que él se crea otro personaje, trabaja como fotógrafo, ya no tiene la misma compañera que tenía antes. Es otro Palma Salamanca, alguien que clandestinamente tuvo que adoptar una nueva personalidad", afirmó.
"Para mí, lo importante es que conquistó su libertad con su huida y su nueva vida. Por eso digo que no es el mismo Palma Salamanca que ajusticia a Jaime Guzmán", remarcó, antes de finalizar ofreciéndole un consejo.
"Le diría que haga un análisis autocrítico del ajusticiamiento de Jaime Guzmán. Tengo la impresión que él inicialmente estuvo en desacuerdo con la operación y lo hizo saber, pero que su organización le había reiterado la orden, y la cumplió. No sé si será así, pero en todo caso le diría que reevalúe lo que esto ha significado para su vida", dijo el sociólogo.
