Fueron formalizados por el deceso de Jorge Ramírez.
Quedaron suspendidos de sus funciones.
Los funcionarios quedaron recluidos en el centro de detención Capitán Yáber.
La Fiscalía Metropolitana Sur formalizó a cuatro funcionarios de Gendarmería acusados de propinar una golpiza a cuatro internos de la cárcel de Puente Alto, situación que culminó con uno de los reos fallecidos.
Los hechos se registraron el 31 de diciembre de 2011, cuando los internos consumían chicha artesanal horas antes de la llegada del nuevo año, momento en que comenzaron los desordenes.
Los gendarmes, a cargo de un teniente primero, llegaron hasta la celda para controlar la situación, y más tarde Jorge Ramírez Milla falleció en el Hospital Sótero del Río producto de una presunta intoxicación, no obstante, según la Fiscalía, hubo abusos de parte de los uniformados que los acusa de apremios ilegítimos y tormentos.
"Los obligan a beber alcohol mientras los mantienen haciendo ejercicios, lo que causa que comiencen a vomitar y perder la conciencia, posteriormente se les aplica agua helada con mangueras de incendios, se les mantiene desnudos durante largo rato en un lugar frío", señaló el fiscal Óscar Mérida.
Así, el teniente primero Néstor Pinto Pinto, además de los cabos segundo Rodrigo Aravena Muñoz y Juan Tapia Morales, junto al gendarme Luis Huenchuleo Calbún, quedaron en prisión preventiva.
Pedro Hernández, dirigente de la Asociación Nacional de Funcionarios Penitenciarios (Anfup), desestimó las acusaciones.
"Estamos acostumbrados a que nos acusen todos los días y en todos los casos, no hemos tenido ningún caso en que los internos digan que los tratamos con cariño. Aquí la Fiscalía lo que está diciendo es que una personas murió a causa de maltrato de gendarmes y eso es lo que decimos que es falso", sostuvo el dirigente gremial.
Desde Gendarmería, el coronel José Maldonado confirmó que los cuatro funcionarios fueron suspendidos de sus funciones "hasta la total tramitación de la investigación que sigue el Ministerio Público y el juicio, si así lo hubiese".
Los cuatro gendarmes involucrados en el hecho fueron trasladados hasta una sección especialmente destinadas a uniformados para que cumplan con la prisión preventiva en CDP Capitán Yáber, ubicado en el centro de Santiago.
