Se habilitaron dos nuevas torres en el área laboral solo para condenados por primera vez.
El ministro de Justicia, José Antonio Gómez señaló "los queremos separar de la población penal".
La planificación realizada en conjunto con Gendarmería permitirá que los reclusos puedan terminar su enseñanza básica y media.
282 reos de distintos penales de la Región Metropolitana, en su mayoría de la ex penitenciaría de Santiago, Talagante y Puente Alto, fueron trasladados hasta la cárcel de Colina I, donde se habilitaron dos nuevas torres en el área laboral solo para reos condenados por primera vez.
El objetivo de la iniciativa, impulsada por el ministerio de Justicia, es evitar que estos internos que no están condenados por delitos violentos tengan contacto con la experiencia delictual, facilitando así su reinserción social.
El ministro José Antonio Gómez señaló que "hemos dado el primer paso para romper el circuito del delito. Aquí hemos transportado a 282 internos y van a llegar probablemente más".
"Vamos a analizar sus delitos y su capacidad de integrarse a este penal que es de primerizos, aquellos que han cometido un solo delito. Los queremos separar de la población penal, vamos a hacer este trabajo a lo largo de todo el país", manifestó.
En esta nueva zona habilitada en Colina I, los presos podrán tener -incluso- radio o televisión. Cada módulo está habilitado para recibir a 256 internos cada uno. Cada celda cuenta con cuatro literas para ocho presos, con su respectivo baño. Además, podrán recibir visitas en los mismos módulos.
Según las autoridades, el traslado no fue impuesto y que, al contrario, se le preguntó a los mismo internos. Uno de los trasladados, que fue condenado a tres años por desacato, aseguró que esta es una "segunda oportunidad".
La planificación realizada en conjunto con Gendarmería permitirá que los reclusos puedan terminar su enseñanza básica y media, y capacitarse en diferentes trabajos.
