El "pastor" Javier Soto podría recibir hasta 541 días de presidio por agresiones contra el vocero del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez.
Durante la audiencia, desarrollada este viernes, el autodenominado pastor evangélico no reconoció haber agredido y calumniado a Jiménez, pese a que -de reconocer la imputación- sólo habría enfrentado una pena máxima de 61 días de presidio.
El vocero del Movilh presentó la querella el 29 de diciembre pasado debido a los constantes acosos de los que era víctima tanto él como otros activistas por parte de Soto.
Sin embargo, a la salida de tribunales Soto volvió a increpar a Jiménez por lo que éste último indicó que el evangélico ha realizado "acusaciones siniestras en contra de mi persona y de la institución a la que yo pertenezco".
"Esperamos la audiencia en marzo y esperamos que este tipo termine en la cárcel, que es el único lugar donde él puede terminar", agregó Jiménez.
"Si hay que predicarle a los reos, le predicamos"
Respecto a su decisión de no admitir el delito para rebajar condena, Soto indicó que fue la decisión "correcta, porque nosotros los chilenos no somos cobardes. Nosotros tenemos que dar la cara y yo de un principio he dado la cara y seguiré dándola".
Además aclaró que seguirá "enrostrándole al señor Rolando Jiménez en su misma cara su perversión y su inmundicia", y añadió que "no me voy a arrancar ni atemorizar, menos por Rolando Jiménez, es muy barato este hombre".
"Lo que me da fuerzas a mí es seguir predicando el evangelio y si hay que ir a predicarle ahora a los reos, le predicamos", agregó.
El juicio oral se realizará el 27 de marzo en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago.