La Quinta Sala de la Corte de Apelaciones de San Miguel ratificó un fallo en primera instancia del Primer Juzgado de Letras de Talagante que condenó a los dueños del circo "Los Tachuelas" a pagar 102 millones de pesos por su responsabilidad en un accidente que causó la muerte de un menor de edad en 2004.
En un fallo unánime los ministros Roberto Contreras, Adriana Sottovia y el abogado integrante Adelio Misseroni ratificaron la resolución de la jueza de Talagante Paula Jara, quien condenó a Joaquín Maluenda, dueño del circo, a pagar 100 millones a los familiares de Thomas Villar Ibarra, quien murió el 3 de junio de 2004, aplastado por un muro que derribó la elefanta "Ramba".
Los otros dos millones de pesos se adeudan a Rosa Cabello Hernández, quien resultó con lesiones en el incidente, del cual la Justicia confirmó la responsabilidad del empresario por la "falta de control del animal", que se "mantenía en un predio sin ningún tipo de medida de seguridad o resguardo".
Las víctimas fueron aplastadas cuando caminaban por la calle Esmeralda de Talagante. Al pasar junto al sitio donde estaba instalado el circo se acercaron a un muro sobre el cual se asomaba la trompa de la elefanta. Dada la envergadura del animal, el muro medianero cedió, aplastando a Thomas Villar Ibarra y provocando lesiones en un pie a Rosa Cabello.
En el fallo el tribunal de alzada señala que el circo "generó libremente la situación de riesgo, consistente en mantener una elefanta en un predio, sin emplear el cuidado requerido para un animal de esta envergadura".
Se dio por acreditado que "Los Tachuelas", entonces, actuaron "negligentemente al no adoptar las medidas de cuidado necesarias para evitar que la elefanta (...) derribara la pared medianera, causando la muerte del menor Thomas Villa Ibarra y lesiones a doña Rosa Cabello Hernández, pues la tenencia de una animal de esas características requiere la adopción de medidas especiales de resguardo y seguridad, las cuales no fueron adoptadas", sostiene el fallo.