El fiscal nacional, Jorge Abbott, desdramatizó las últimas resoluciones judiciales en dos casos sobre torturas y abusos sexuales presuntamente cometidos por Carabineros y descartó que se trate de "reveses" para el Ministerio Público.
Esta semana la Corte de Apelaciones de San Miguel revocó la prisión preventiva de los seis carabineros acusados de tortura y abuso sexual agravado contra el estudiante de Medicina Josué Maureira en una comisaría de Pedro Aguirre Cerda, tras determinar que los antecedentes por la Clínica Jurídica de la Universidad Católica, que representó al joven en la causa, no confirmaban ninguno de los delitos imputados.
Asimismo, la Corte de Santiago también revocó dicha medida cautelar para los cinco carabineros formalizados por tortura contra Moisés Órdenes, caso ocurrido en la Plaza Ñuñoa durante los primeros días del estallido social y que se viralizó a través de redes sociales: desechó el delito imputado y estimó que sólo había violencia innecesaria, por lo que ordenó la libertad de los uniformados.
Ante esto, Abbott planteó que "más que un revés, la resolución de los tribunales es para simplemente tenerlas en cuenta en lo que dice relación con las investigaciones que llevamos adelante".
"Nosotros a partir de los hechos que actualmente están en investigación, hemos solicitado medidas cautelares intensas, y la Ilustrísima Corte de Apelaciones ha estimado que esas medida cautelares no se condicen con la situación de los imputados, y lo que nos corresponde a nosotros es respetar las resoluciones judiciales, y mejorar las investigaciones en el evento que esas decisiones tengan que ver con la falta de algunos antecedentes de la investigación", expuso.
Caso Josué Maureira: Abogada cuestionó decisión de la Corte
En el caso de Josué Maureira, el denunciante dijo que fue detenido después de una protesta el pasado 21 de octubre, y que tras haber sido golpeado en repetidas ocasiones e insultado por su orientación sexual, los policías insertaron un objeto en su ano; sin embargo, el tribunal de alzada de San Miguel estimó que los antecedentes no confirman aquello.
En este marco, la abogada María Elena Santibáñez, quien representa al universitario, apuntó que "me parece que lo que hay es determinar si efectivamente hay una introducción parcial o sencillamente se trata de golpes en la zona, pero lo que está acreditado es que efectivamente existen (lesiones) en la zona".
"Desde el día 1 siempre se ha señalado que la penetración completa no existe, no hay una penetración completa, eso está acreditado del día 1", señaló.
Además, criticó que "considerando que son sólo dos los imputados que están vinculados al delito más grave, que sería el abuso sexual, y el resto de los imputados siguen por el delito de torturas, que sigue siendo igualmente grave, se da un tratamiento igual para todos, lo que hace que bajo esa lógica debiese haberse mantenido la misma cautelar".