El senador de la República le bajó el perfil a la situación, que consideró "muy normal".
"No vengamos a hacernos las víctimas", clamó el UDI, quien desde que enfrentó una investigación penal por platas políticas critica recurrentemente al Ministerio Público.
El senador de la UDI Iván Moreira le bajó el perfil a las amenazas recibidas por la fiscal Ximena Chong, quien formalizó el fin de semana al Carabinero imputado por empujar a un menor al lecho del río Mapocho en una manifestación.
La persecutora cuenta hoy con protección de la PDI en su hogar, hasta donde la noche del martes llegaron dos sujetos a dejarle una carta mediante la cual amenazan contra su integridad sicológica y física, debido a que -dice la misiva- funcionarios "corruptos" como ella "no tienen cabida en nuestra nación", por lo que -advierten- tomarán las "medidas necesarias, sean cuales sean, para defender nuestro país".
Incluso la mañana de este miércoles, cuando ya se había instalado personal de la PDI en el lugar, un sujeto en moto dio varias vueltas por la casa de Chong, que tras ser controlado resultó ser un teniente coronel de Carabineros; ambos hechos, que son investigados, de momento no pueden ser vinculados.
Consultado por 24 Horas, Moreira consideró "muy normal" las situaciones que ha vivido la persecutora: "Cuando uno provoca políticamente se expone a este tipo permanente de amenazas", minimizó el senador de la República.
"No vengamos a hacernos las víctimas (...) siempre ha sido así, vean Twitter, y no solamente es a fiscales", agregó desde el Congreso Nacional.
El Ministerio Público "es una institución que debiera tener la mayor respetabilidad", pero, según su postura, "vemos una gran cantidad de fiscales totalmente politizados, entonces cuando uno hace política como fiscal, es sin llorar".
"Nadie va a aplaudir que haya amenazas, pero no vengamos a hacernos las víctimas, aquí hay un doble estándar de la Fiscalía", insistió, añadiendo que "cuando uno es figura pública, que aparte de la labor que debe ser transparente, objetiva, usa un lenguaje político, como usa esta fiscal, se expone a este tipo de reacciones".
Asimismo, criticó que el fiscal nacional, Jorge Abbott, le manifestara su preocupación el ministro del Interior, Víctor Pérez, por las amenazas sufridas por la persecutora.
"Cuando a un político lo persiguen, lo atacan, o a otra autoridad de Gobierno le pasa algo, no veo ese interés del fiscal nacional. (La preocupación es) cuando le conviene. No nos vengamos a quejar de lo que está pasando, porque la provocación permanente la hacen algunos fiscales, entre ellos, la señora Chong", dijo.
Moreira ha sido un crítico recurrente contra la Fiscalía, que hace años llevó una investigación penal que lo imputó por la facilitación de boletas ideológicamente falsas al grupo Penta, que el senador utilizó para ocultar aportes ilegales de 35 millones de pesos a su campaña senatorial de 2013, en el bullado caso recordado por el "raspado de olla". En la causa el UDI evitó ir a juicio oral, en enero de 2018 acordó una suspensión condicional del procedimiento y en febrero de 2019 fue sobreseído definitivamente por la Justicia.
