Los impulsores del libelo afectan también "a los vecinos de Plaza Italia y a todo el país", sostuvo el ministro del Interior.
El presidente de RN, Mario Desbordes, aseguró que Chile Vamos votará en bloque en el Senado
El ministro del Interior, Gonzalo Blumel, lamentó que se aprobara la acusación constitucional contra el intendente metropolitano Felipe Guevara en la Cámara de Diputados, y aseguró que ésta sólo busca dañar al Gobierno.
En el programa "Estado Nacional" de TVN, el ministró aseguró que a Guevara se le acusa "sobre la base de algo que ha sido la práctica recurrente" en cuanto a control de orden público, lo que "demuestra que el único objetivo es causar un daño político al Gobierno".
"De lo que no se dan cuenta -o quizás se dan cuenta pero no les importa- es que el daño político, más que el Gobierno, se causa a los ciudadanos de Plaza Italia y a todo el país que quiere que se resguarde el orden público", señaló Blumel en la televisión.
En este contexto, el presidente de RN, Mario Desbordes, aseguró que, en el Senado, la derecha votará en bloque contra el libelo.
"Todos los parlamentarios de la UDI, Evópoli y RN, apoyamos al intendente", señaló el diputado: "En (su) contra estuvo la oposición y el partido de José Antonio Kast, que tampoco quiso votar a favor del intendente y eso hay que decirlo fuerte y claro".
No obstante, "vamos a estar unidos en el Senado, y espero que esta acusación sea rechazada: no tiene ningún sustento y es una señal muy negativa que se le está dando a la ciudadanía y una señal, prácticamente, de apoyo a los encapuchados", lamentó el timonel.
Guevara, en tanto, apareció el sábado en el Consejo General de RN, en donde fue recibido con una ovación de parte de los integrantes de su partido.
Tras la instancia, el suspendido intendente agradeció el apoyo que le ha dado, en general, Chile Vamos. "Hubo tres ministros todo el día, tres subsecretarios trabajando en la Cámara de Diputados durante todo el día jueves, agradecer también a mi familia que me acompañó y también a Chile Vamos. Yo vi a los diputados de Renovación Nacional, muy matriculados por la causa, pero también vi a los diputados de Evópoli y los diputados de la UDI muy cuadrados", destacó.
"Yo he sentido el respaldo del Gobierno del Presidente Piñera, del propio Presidente en persona, de Chile Vamos, de mi familia y de mi partido", agregó.
Ayer sábado los consejos generales del PRI y Evópoli confirmaron que su postura frente al plebiscito de abril será el "Apruebo" a una nueva Constitución, mientras que en RN se decidió de dejar en libertad de acción a sus militantes.
El presidente de Evópoli, Hernán Larraín Matte, señaló que aunque declararon su posición, también "refrendamos dos compromisos muy importantes: en primer lugar, la libertad de acción personal".
"Vamos a ser muy respetuosos de las distintas visiones que hay en relación al plebiscito, que son todas muy legítimas, democráticas. A su vez, hay un compromiso muy potente del partido de defender la Constitución liberal", declaró Larraín, que espera "que este plebiscito sea una oportunidad para que hablemos de contenidos".
"Nosotros venimos trabajando hace muchos años en la idea de poder tener una Constitución que no sea de izquierda ni de derecha, sino que una Constitución para todos los chilenos", agregó, subrayando también que "respetamos lo que vayan a hacer nuestros partidos aliados".
Tras la jornada de definiciones, la senadora y presidenta de la UDI, Jacqueline van Rysselberghe, señaló que la votación en Chile Vamos siempre estuvo clara, considerando que su partido será el único del bloque que irá derechamente por el "Rechazo".
"Yo creo que en Chile Vamos estaba clara la situación: ayer hubo los dos consejos generales de los otros partidos de la coalición y, claramente, dentro de los partidos de centro derecha, somos el único partido que está institucionalmente por el 'No'", indicó la senadora.
"La UDI ha siempre ha sido un partido que toma posición. Hay gente de nuestro partido que piensa que el mejor camino para poder satisfacer las demandas sociales es el 'Apruebo', nosotros creemos mayoritariamente que no", aseguró Van Rysselberghe, fustigando que "eso genera una inestabilidad en el país de más de dos años y medio".
"Creemos que es innecesario, porque ninguna de las demandas sociales se satisface con un cambio a la Constitución", sentenció.
