En medio de la crisis social que se vive en el país y de los estados de excepción que se implementaron para aplacarla, la aprobación del Presidente Sebastián Piñera según la encuesta Cadem se desplomó a un 14 por ciento.
La Tercera consignó que la medición se realizó entre el miércoles y el jueves de esta semana, previo a la marcha que reunió a más de un millón de personas en Santiago, a que el Mandatario anunciara la renuncia de todo su gabinete y que levantará los estados de emergencia este domingo.
Tomando en cuenta también la dramática alza de un 78 por ciento de su desaprobación, Piñera rompe así un récord desde la transición a la democracia, por debajo de la marca que consiguió en la misma encuesta la ex Presidenta Michelle Bachelet, con un 18 por ciento de aprobación y un 68 por ciento de rechazo a su gestión en medio del caso Caval, en 2016.
En el sondeo del 18 de octubre, un 29 por ciento de los encuestados aprobaba la administración de Piñera, mientras que un 58 por ciento estaba en contra de ella. En esta ocasión, además, se registró una notoria caída entre las personas que se identifican con la derecha (de un 57 a un 40 por ciento).
Si bien esta vez no se midió la aprobación de su gabinete, que enfrentará una inminente modificación en los próximos días, la gestión del ministro del Interior, Andrés Chadwick, contó con la aprobación de apenas un 12 por ciento, y la desaprobación del 80 por ciento; mientras que la intendenta metropolitana Karla Rubilar logró un 31 por ciento a favor y un 53 por ciento en contra.
Tomando en cuenta su reacción a la crisis, los parlamentarios de Chile Vamos y el Frente Amplio contaron con un 16 por ciento de aprobación en ambos casos, mientras que su desaprobación alcanzó un 64 y un 65 por ciento, respectivamente.
Las razones de la caída
Entre los principales motivos para esta baja se destacan un "mal manejo de las protestas" y una "mala gestión en general", además, que Piñera "no escucha a la gente", "no cumple sus promesas" y "protege intereses de empresas y élites".
Los sondeados también apuntaron a las "bajas pensiones"; "desigualdad y abusos"; "gestión de educación y salud"; "bajos sueldos"; "elevado costo de servicios básicos"; "mal gabinete y asesores" y "falta de seguridad", como los principales motivos de la protesta.
Asimismo, un 86 por ciento rechazó que en medio de la crisis el Presidente asegurara que "Chile está en guerra contra un enemigo poderoso", y sólo un 11 por ciento estuvo de acuerdo.
Todo esto pese a que un 50 por ciento también cree que "los hechos de violencia provienen de grupos organizados", versus un 45 por ciento que toma distancia de ese planteamiento.
En tanto, quienes siguen apoyando a Piñera lo hacen porque, entre otras razones, "trata de resolver la crisis"; "es buen Presidente"; "me identifico con su postura política"; "fue elegido democráticamente"; por la "estabilidad y el crecimiento económico"; "cumple lo que promete"; "ha mejorado sueldos, pensiones y trabajo"; "respeta al extranjero" y "plantea ideas y proyectos".
Estados de excepción y atención de las demandas
Por otro lado, un 49 por ciento está de acuerdo con la presencia militar en las calles para controlar la situación, mientras que un 45 por ciento rechazó la medida. En tanto, un 55 por ciento favorece que se dictaran toques de queda, y un 43 por ciento estuvo en contra.
En tanto, el paquete de medidas para responder a las demandas populares que llevaron a más de un millón de personas a manifestarse esta semana fue evaluado "mal o muy mal" por el 53 por ciento de los encuestados.
Un 30 por ciento de los encuestados señaló que la batería de proyectos está "bien o muy bien", y un 13 por ciento la tildó de "regular". En tanto, un 80 por ciento no cree que cumplan con lo que se exige, y solo un 18 por ciento discrepa.
Evaluación de las medidas para aplacar la crisis.
En ese sentido, un 37 por ciento opina que el Gobierno debe efectuar "cambios sociales"; un 21 por ciento aboga por "mejorar las pensiones y AFPs"; un 13 por ciento pide "mejorar salud y precios de medicamentos", y otro 13 por ciento habla de "mejorar los sueldos"; mientras que un 12 por ciento llama a "escuchar a la gente y empatizar", y otro 12 por ciento apoya "una nueva Constitución".
Respecto a los medios para protestar, un 89 por ciento rechazó la "violencia y destrucción de la propiedad pública del Metro", y un 9 por ciento dijo apoyarla; mientras que el 90 por ciento condenó los robos y saqueos, y solamente un 7 por ciento está de acuerdo con ellos.
Finalmente, un 46 por ciento de los encuestados cree que tomará "un par de semanas retomar la normalidad"; un 23 por ciento estima que demorará "meses", mientras que un 17 por ciento que será "muy difícil", y un 11 por ciento señala que "volverá pronto".