La Confederación de la Producción y del Comercio (CPC) se mostró abierta a aportar para abordar la crisis social que se vive en el país e hizo un llamado a los empresarios a "ser parte de la solución".
La CPC realizó una reunión extraordinaria esta mañana para analizar la contingencia del país, tras la cual su presidente, Alfonso Swett, reconoció que "sabemos que tenemos que agrandar nuestros corazones, con generosidad".
"Sabemos que tenemos que agrandar nuestras manos, meternos las manos al bolsillo y que duela", planteó, porque "lo que no tiene precio es el dolor, el cansancio, la pérdida de paz social y eso tenemos que recuperarlo".
"Y nosotros, hoy, más que ser espectadores y analistas, tenemos que ser parte de la solución", instó al gran empresariado.
Consultado sobre las declaraciones formuladas en Cooperativa por el nuevo ministro de Hacienda, Ignacio Briones, de que entre las repercusiones de la crisis social, "obliga a sincerar las cifras (de crecimiento) porque, en parte, tenemos una nueva realidad", Swett apuntó que en el contexto actual aquello "pasa a segundo plano".