Un joven de 19 años denunció esta madrugada haber recibido impactos de perdigones de Carabineros en su rostro y brazos en las cercanías de la Subcomisaría de Parque Brasil, en La Granja, donde hubo una manifestación que finalizó en incidentes durante la jornada del lunes.
El hombre, identificado como Chrístopher Araya Millar, llegó hasta el Hospital de Urgencia Asistencia Pública (HUAP) en Santiago, también conocido como Posta Central, expresando que había sido impactado en su ojo derecho y extremidades por proyectiles disparados "a unos 10 metros" de distancia.
El joven aseguró que estaba en su casa junto a su polola y sus padres cuando escucharon enfrentamientos entre la policía y manifestantes cerca de su casa, en el sector de Parque Brasil. "Salí de la casa y Carabineros empezó a disparar. Me llegaron dos perdigones en el ojo y uno en el brazo", expuso.
"Probablemente pueda perder (la visión) porque tengo un perdigón detrás del ojo y otro en el párpado", denunció el joven tras salir del hospital capitalino.
A pesar del carácter de las lesiones, el afectado no quedó hospitalizado y, según su relato, fue derivado al Hospital del Salvador para extraer los proyectiles.
La versión de Carabineros
El coronel Julio Santelices, vocero del Departamento de Comunicaciones de Carabineros, relató que, "en primer lugar, un grupo de mujeres realiza un evento artístico frente al cuartel, y una vez que termina este evento, baja la luz natural y comienzan los desórdenes graves".
"(La unidad) fue atacada con armas de fuego, con hondas con balines de acero, y estas graves alteraciones al orden público, y especialmente el riesgo de la vida de Carabineros, obligó a utilizar la escopeta antidisturbios", aseguró.
Sobre el joven lesionado, Santelices sostuvo que se está investigando, pero apuntó que "no tenemos información respecto al lesionado con un perdigón, él no ha hecho la denuncia en Carabineros, por tanto no sabemos el carácter de las lesiones. Nos hemos enterado sólo por redes sociales y medios de comunicación, esto tiene que investigarse".
Los cientos con heridas oculares
Según el último reporte del estatal Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), un total de 241 personas han sufrido heridas oculares desde el pasado 18 de octubre, cuando se iniciaron las movilizaciones más importantes desde el retorno a la democracia en 1990.
El INDH informó el 27 de noviembre que presentó una querella por homicidio frustrado contra el cuerpo de Carabineros por el lanzamiento de una bomba de gas lacrimógeno a una mujer, que acabó por provocarle ceguera total.
Se trata de la segunda persona que pierde por completo la visión debido a disparos policiales durante la agitación social que vive el país, luego de que el 26 de noviembre el joven Gustavo Gatica quedara finalmente ciego por los perdigones que recibió en el rostro durante una manifestación.
La nueva víctima afectada de ceguera, Fabiola Campillai, de 36 años, recibió el impacto de la bomba de gas lacrimógeno el martes pasado cuando esperaba el autobús para dirigirse al turno de noche de su trabajo en Santiago.
Organizaciones como Amnistía Internacional (AI) y Human Rights Watch (HRW) han denunciado que los cuerpos de seguridad han hecho un uso excesivo de la fuerza y han violado los derechos humanos durante las protestas.
El general director de Carabineros, Mario Rozas, anunció el 19 de noviembre la suspensión temporal del uso de perdigones o balines para controlar las manifestaciones tras tener dudas sobre la composición real de las municiones y luego de que la Universidad de Chile asegurase que los proyectiles no son solo de goma sino que también contienen plomo, lo que explicaría el alto número de heridos.