Incidentes entre manifestantes y Carabineros ocurrieron este sábado en la comuna capitalina de Ñuñoa durante una protesta para pedir justicia por la muerte de Francisco Martínez, el malabarista que ayer fue abatido en plena calle por un funcionario de la policía militarizada en la ciudad sureña de Panguipulli, un episodio que desató una nueva ola de críticas contra esa institución.
Convocadas a través de las redes sociales bajo el eslogan "No más impunidad, justicia para Francisco", centenares de personas se congregaron en la Plaza Ñuñoa, en medio de la fase 3 que rige en el barrio y que restringe a un máximo de 50 personas las reuniones en espacios abiertos.
Un contingente de Carabineros reprimió la marcha con carros lanza-agua y gases lacrimógenos, mientras algunos manifestantes arrojaban piedras y otros objetos contundentes.
El tránsito fue cortado en las calles Dublé Almeyda y Av. Irarrázaval a la altura de la estación del Metro Chile España.
En la Región del Biobío, las manifestaciones de este sábado fueron disuadidas por un gran contingente policial, botes de gas lacrimógeno y carros lanza-aguas y dejaron un saldo de seis detenidos, todos ellos en la ciudad de Concepción.
En la víspera también se produjeron graves incidentes en Panguipulli, donde grupos de manifestantes levantaron barricadas al tiempo que fueron incendiados un total de 10 edificios de instituciones públicas, entre ellos la alcaldía, que fue consumida por las llamas.