Trabajadores bloquearon la madrugada de este miércoles todos los accesos a la mina de Chuquicamata durante cinco horas, por lo que el yacimiento a tajo abierto más grande del mundo dejó de producir cobre.
Todos los sindicatos se sumaron a la movilización y hablan de un paro de advertencia, ya que acusan que Codelco, propietaria del mineral, no ha cumplido varios puntos del contrato colectivo firmado a fines de 2016.
Los trabajadores acusan que no se han efectuado ascensos en cargos vacantes y no se ha aumentado la dotación de funcionarios, vulnerando así derechos adquiridos.
El presidente del sindicato Número 1 de Trabajadores de Chuquicamata, Hilario Carrasco, explicó a Cooperativa que "hay tres puntos súper relevantes que tienen que ver con los ascensos, los reemplazos y los concursos".
"Para todo el mundo es conocido que se fueron sobre 1.400 trabajadores y lo que pactamos fue un tema de que la gente egresara, pero nunca de perder los cargos y comprometer la carrera funcionaria de los trabajadores, entonces hay un incumplimiento de parte de la administración", añadió el dirigente.
Desde los sindicatos no descartan nuevas movilizaciones, mientras que desde la empresa calificaron este paro de ilegal, aseguraron respetar el contrato colectivo y que están evaluando los efectos de esta paralización.