El concejo municipal de Vallenar aprobó, por unanimidad, una moción para suspender los fuegos artificiales de Año Nuevo y destinar dichos recursos a la compra de mil cenas navideñas para ir en ayuda de las personas más vulnerables de la comuna.
Los ediles coincidieron en que los cerca de 15 millones de pesos que corresponden al costo de los espectáculos pirotécnicos fueran dedicados, en definitiva, a responder a las actuales inquietudes de la comunidad.
La medida rige también para las localidades de Incahuasi y Domeyko. Las cenas se canalizarán a través del departamento de Desarrollo Comunitario.
"Hemos decidido suspender el lanzamiento de los fuegos artificiales para este año, en vísperas del año 2020, producto de la contingencia que está viviendo el país, fundamentalmente", dijo el alcalde de Vallenar, Cristian Tapia.
"Ya está quedando mucha gente desempleada. En el mes de diciembre, seguramente, va a aumentar ese desempleo, y queremos que en ninguna casa estemos mirando fuegos artificiales mientras, tal vez, en Navidad no tengamos que comer", explicó.
Tapia contó que "también se tomó la decisión de encender los árboles de Navidad tanto en la plaza, como en 35 sectores poblacionales, incluyendo los sectores rurales, pero en forma más simbólica, entregando un mensaje a la comunidad", agregó.
Otra actividad comunal que se está estudiando suspender es el "Festival del Verano" 2020.
El resto de la región
En tanto, en las comunas de Copiapó y Chañaral, el tema de la suspensión de los fuegos artificiales entrará en la tabla de los próximos concejos a celebrarse.
En Caldera, por su parte, la opinión de los concejales está dividida. Por este motivo se está estudiando resolver el tema mediante una encuesta.
