En la víspera de una nueva conmemoración del Día Internacional de la Mujer, la economista Andrea Repetto instó al Congreso Nacional a sacar adelante el proyecto de ley sala cuna universal, aprobado el martes por la Comisión de Educación del Senado y despachado al Pleno, con el objetivo de impulsar la participación femenina en el mercado laboral y reducir las brechas de género.
En conversación con Lo Que Queda del Día de Cooperativa, la directora de la Escuela de Gobierno de la Universidad Católica afirmó que "tenemos un modelo de salas cunas que tiene un montón de problemas", recordando que actualmente ese derecho está establecido en el artículo 203 del Código del Trabajo y es exclusivo para las trabajadoras de empresas que cuenten con 20 o más mujeres contratadas.
"La sala cuna ha sido un tema muy difícil. Ha habido casi 20 proyectos de ley en el Congreso ingresados tratando de modificar este artículo a partir del año '97, tanto mociones parlamentarias como iniciativas de ley del Ejecutivo, y aquí seguimos. No estamos exactamente en la misma posición que antes: ahora hay un proyecto que ha avanzando un poquito más, pero ha sido muy difícil echar a andar una solución y cambiar este artículo que es malo para la sociedad como un todo, al asociar a las mujeres el cuidado y todos estos deberes, incluso, con la carga laboral adicional", afirmó.
Acusó, además, que la normativa vigente "segrega a los niños y las niñas: hay algunos que tienen derecho a estos servicios de cuidados y de estimulación temprana dependiendo de cual es la situación laboral de sus madres".
LOS NUDOS
La economista identificó dos nudos que han trabado el avance de la sala cuna universal: "Uno es el costo, que hoy día lo cargan algunas empresas y, al final, las mujeres, a través de un castigo en la empleabilidad y en los salarios, porque eso efectivamente se traspasa. Las propuestas que se hacen, en general, pasan por crear un fondo común que pueda permitir financiar este sistema y agregar fondos públicos".
"El segundo aspecto que dificulta este proyecto, y que es la parte más difícil y donde hay que hacer un trabajo de conversación, es que son proyectos que vienen desde la perspectiva laboral sobre la situación de empleo de las mujeres pero que, por lo general, no trae una perspectiva educativa y del aseguramiento de la calidad", indicó.
Consultada por sus expectativas sobre el futuro del proyecto a corto plazo, Repetto enfatizó: "Este año es de elecciones y eso hace más difícil (la discusión); sin embargo, quiero tener fe y optimismo en la importancia de este tema. Es una súper buena señal que haya avanzado en la Comisión de Educación del Senado".