La ministra del Interior, Carolina Tohá, detalló que la acción significará un aumento de $1.400 millones en recursos.
No obstante, apuntó que existen “enredos administrativos menores” que limitan la rápida ejecución de la medida.
La ministra del Interior, Carolina Tohá, anunció esta mañana el plan del Gobierno del Presidente Gabriel Boric para concretar vuelos de expulsión de personas extranjeras en situación irregular en el país.
La secretaria de Estado especificó que se trata de vuelos comerciales y de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) con destino a Venezuela, Colombia y República Dominicana, lo que implica un aumento de recursos de $1.400 millones.
"Este año, hace pocas semanas, se acaba de suplementar los recursos para expulsiones en 1.400 millones de pesos. Eso nos va permitir contratar dos vuelos comerciales y tener adicionalmente un vuelo de la Fach dirigidos en dos casos a Venezuela y en el tercer caso a algún otro país, probablemente República Dominicana o Colombia", explicó a Radio Universo.
No obstante, reparó en que "adicionalmente a eso, todas las semanas hay personas que se expulsan en vuelos comerciales".
Por otro lado, el director del Servicio Nacional de Migraciones, Luis Thayer, indicó este martes que la cantidad de personas que pueden ser expulsadas depende de la capacidad del avión.
"Hay vuelos de la Fuerza Aérea que tienen capacidad para 60 personas y hay vuelos comerciales que tienen capacidad para 120. Recordemos que las expulsiones se realizan también con escoltas, por temas de seguridad", precisó.
En ese sentido, la titular del Interior detalló que "el tema es que la legislación internacional exige que por cada persona que se expulsa haya dos personas de la policía que los escolta. Entonces, efectivamente esto tiene costos muy importante, porque hay que pagar esos pasajes también, y distrae funcionarios".
Sin embargo, aseguró que dicha situación no es un obstáculo para ejecutar expulsiones. "En todo este tiempo no hemos estado limitado por los recursos ni por los funcionarios, lo que nos limita son los requisitos que son tan complejos".
"Cuando uno expulsa a Venezuela, nosotros tenemos por ley cinco días (antes eran dos) desde que la personas es retenida para ser expulsada y se le expulsa. El problema es que Venezuela nos pedía que le diéramos la lista siete días antes, después logramos que fueran cinco días, pero eso es muy difícil, porque tenemos los mismos cinco días para armas el grupo y los tenemos que ir a buscar y a detener a sus casas, entonces no se alcanza a tener la lista los cinco días antes. Esas cosas hay que ir puliéndolas y lograr que Venezuela nos permita entregar la lista dos días antes y no cinco", especificó.
"Cosas de ese tipo, que son puros enredos administrativos menores, hacen mucho más difícil el proceso de expulsión, especialmente con Venezuela", sostuvo.
Por otro lado, también se refirió a la relación entre el fenómeno migratorio y la seguridad pública, apuntando que "en los flujos migratorios, sobre todo cuando son masivos, se meten entre medio personas que vienen con una agenda criminal y en este caso además organizaciones criminales y ante eso no se puede ser ingenuo. En ese caso, no se puede dar un trato solamente con la mirada de la migración, hay que dar un trato con la mirada de la seguridad, la integridad y la protección del país".
