La ministra Secretaria General de Gobierno, Cecilia Pérez, aseguró este jueves que el Ejecutivo mantiene su compromiso con la crisis humanitaria que vive el pueblo venezolano y que seguirá acogiendo a estos migrantes siempre que cumplan con el marco legal del país.
Sus palabras llegan en medio de la crisis que se vive en el paso de Chacalluta, en la frontera con Perú, y ahora en Colchane, en el límite con Bolivia, donde cientos de venezolanos esperan se les permita ingresar al país.
"Nosotros tenemos un firme compromiso en poder acoger la crisis humanitaria que hoy día vive el pueblo venezolano, pero dentro de nuestro marco legal. Bienvenida la inmigración, pero ordenada, legal y como corresponde a la legislación chilena", afirmó la vocera.
La directora nacional del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), Consuelo Contreras, levantó la alarma en Cooperativa al asegurar que los migrantes están en condiciones sumamente precarias en Chacalluta, al punto que se están violando sus derechos humanos, y que esta situación se puede repetir en otros puntos fronterizos, como Colchane.
Contreras dio a conocer también que la exigencia de una visa de responsabilidad democrática, que antes no les solicitaba, sorprendió a muchos de los migrantes que llegaron a la frontera y que otros no tienen pasaporte por los prohibitivos precios que se cobran en Venezuela (cerca de 1.500 dólares: más de un millón de pesos chilenos) por uno.
Alcalde de localidad boliviana: Ya no vamos a poder aguantar unos días más
En tanto, el alcalde mayor de la localidad boliviana de Pisiga, William Colque, dijo estar desesperando por la gran cantidad de venezolanos que han llegado a lugar y que esperan poder ingresar a Chile a través de Colchane.
"Tenemos de la Iglesia Católica unas hermanas que han hecho justamente un albergue para migrantes y están muchos en algunos alojamientos que, como solidaridad, los estamos apoyando", dijo Colque. "Se está haciendo una olla común con apoyo de la arquidiócesis de Oruro y también algunos aportes de la población", añadió el jefe comunal.
"Nosotros estamos también preocupados porque ya no vamos a poder aguantar unos días más y estoy también desesperado (...). Ya nos ha colapsado el sistema de agua, estamos con problemas de temas de salud porque son casi 200 personas, casi el 90 por ciento profesionales que tienen familiares en Chile, y que quieren tener la oportunidad de trabajo en Chile y no en Bolivia", remató Colque.
El alcalde boliviano busca la ayuda de organismos internacionales y de las autoridades para poder enfrentar el gran flujo de migrantes que buscan ingresar a Chile, pero que no pueden esperar en Colchane debido a las agrestes condiciones.
Piden flexibilizar requisitos para venezolanos
En tanto, la representante de Juan Guaidó en Chile, Guarequena Gutiérrez, reiteró su llamado a que las autoridades chilenas flexibilicen los requisitos para el ingreso de venezolanos al país.
Son 126 hombres adultos, 63 mujeres, cuatro de ellas embarazadas, cinco niños, uno de ellos con problemas sicomotores, a todos quienes se les impidió el ingreso al país.
Además, Gutiérrez envió un mensaje a sus compatriotas en las fronteras.
"Que vayan a los consulados de Chile en los países donde están, porque en el paso fronterizo no van a poder pasar y al Gobierno chileno pedimos que se flexibilice la norma para que puedan entrar, es lo único que podemos hacer hasta ahora porque son decisiones de estados soberanos, no tenemos injerencia en este tipo de decisiones", aseveró.
A su vez, el alcalde de Colchane, Javier García, también llamó la atención de lo que está ocurriendo en Pisiga, a pocos kilómetros de su comuna, en territorio boliviano, dado que se trata de personas que durante su migración desde Venezuela, en tránsito hacia Chile no se enteraron debidamente de la nueva exigencia de la visa consular que rige desde la semana pasada.
"El problema no sólo se suscita en la frontera de Perú y Chile, sino también aquí por Bolivia hacia Chile. Cada día está aumentando la llegada de ciudadanos venezolanos para poder cruzar la frontera. Donde tampoco contamos con un clima adecuado para que puedan pernoctar a la intemperie, las temperaturas son muy bajas y se pone en riesgo la vida de estas personas", sostuvo el jefe comunal.