Así lo mostró un estudio que consultó a directivos de las empresas más importantes de Chile.
"Nuestra clase media es mucho más pobre y frágil que lo que desde la élite percibimos", afirmó el Círculo de Directores.
El Círculo de Directores, organización que reúne a los directores de las empresas más importantes de Chile, junto a la firma de big data Unholster, realizaron un estudio que dio cuenta de que la clase alta tiene una percepción alejada de la realidad respecto a la desigualdad en el país.
Según El Mercurio, la investigación se basó en la idea de que existe un desconocimiento de los grupos más acomodados respecto la brecha económica y social de ingresos, patrimonios y acceso a distintos servicios que tiene la clase media y baja; inquetud acrecentada por el estallido social de hace un año.
"Nuestra clase media es mucho más pobre y frágil que lo que desde la élite percibimos", comentó al diario Alfredo Enrione, director del Círculo.
Para la medición se ordenaron todas las comunas del país desde la más rica a la más pobre, a modo de referencia, y se consultó a miembros de las empresas más reconocidas del país.
Se consideró en el extremo alto a Lo Barnechea, Vitacura y Las Condes; en el sector medio a El Bosque, San Bernardo, Quinta Normal y Chillán; y en el estrato menos acomodado a comunas como Lebu, Alto Biobío y Ercilla.
La percepción de los encuestados apuntó a que el 25 por ciento del país es clase baja; el 57 por ciento, clase media; y, un 18 por ciento clase alta.
Las cifras contrastan con los parámetros del Banco Mundial, que indican que la clase media corresponde a un ingreso per cápita entre los 160 mil y 800 mil pesos. De acuerdo con estos indicadores, la distribución correcta en el país corresponde a un 77 por ciento clase baja; un 20 por ciento de clase media; y sólo un 3 por ciento, clase acomodada, explica el matutino.
Respecto al valor de las viviendas en las distintas comunas, los participantes señalaron que el avalúo fiscal de las casas en el nivel socioeconómico más vulnerable alcanza los 27 millones; y que en la clase media, llega a los 84 millones de pesos.
Sin embargo, el valor de una vivienda en las comunas establecidas por el estudio como clase baja llega solamente a siete millones; y, en el grupo medio, en promedio 23 millones de pesos.
En el caso de las isapres, los ejecutivos encuestados aseguraron que el 39 por ciento de la clase media tiene acceso a ellas, siendo la realidad sólo un 18 por ciento.
Alfredo Enrione destacó que este estudio se conoce en un marco "muy importante y decisivo, donde vamos a empezar a conversar sobre el Chile que queremos, pero necesitamos hacerlo sobre la base de datos reales y no desde nuestros prejuicios y percepciones, que son poco precisas".
