El jefe del departamento del Control de Tráfico Ilícito, Carlos Escudero, se refirió a la incautación de más de nueve millones de productos que no cumplen con la certificación necesaria sobre su seguridad para el uso humano, y al trabajo del Servicio Nacional de Aduanas para evitar el ingreso de contrabando al territorio nacional.
En conversación con Cooperativa, dijo que la economía abierta de Chile, al ser uno de los países que tienen "más tratados y acuerdos comerciales", pese a sus beneficios, "tiene algunas cosas negativas como el aumento de la criminalidad, el contrabando y el crimen internacional".
Escudero comentó que el trabajo de Aduanas, en ese sentido, es hacer las declaraciones con un sistema de filtros de inteligencia con parámetros de riesgo, donde se selecciona "una cantidad de entre 3 y 5 por ciento (de los ingresos) para revisarlos físicamente".
Se trata de un rango establecido a raíz del estándar a nivel mundial, ya que de subir el número de revisiones podría "complejizar al comercio internacional", dijo, afirmando que en los controles utilizan "tecnologías no invasivas", pero que con el tiempo "han quedado obsoletas desde el punto de vista tecnológico".
Otras herramientas utilizadas son la trazabilidad, particularmente en el tráfico de cigarrillos para determinar su origen, aunque de momento se encuentran en proceso de aplicarla a otros productos; y el Operador Económico Autorizado (OEA), con el que acreditan a nivel global el cumplimiento de medidas respecto a la seguridad y buenas prácticas en las cadenas de suministros.
CONTROL Y PREVENCIÓN EN LAS ZONAS FRANCAS
Sobre el control y prevención en las zonas francas, Escudero afirmó que "es mucho más complejo" aplicar medidas por la cantidad de mercancía que llega y ya que "ellos gozan del principio de extraterritorialidad".
"Hay mucho producto con destino a Paraguay o Bolivia", que solo transita por Chile. Pero, "lamentablemente hay dos opciones: ingresa a Bolivia y se devuelve por pasos no habilitados", siendo ese "el gran problema que teníamos".
INGRESO DE PIROTECNIA
Respecto al trabajo de las Aduanas para evitar los ingresos de pirotecnia, el jefe de Control de Tráfico Ilícito afirmó que el principal problema para evitar estas importaciones tiene que ver con las legislaciones de los países vecinos, que "no tienen ninguna regulación o restricción para la compra de artificios".
El segundo problema, mencionó, es que los cientos de camiones que entrar por los pasos habilitados, en ellos se "esconden pequeñas cantidades". Por lo que, a pesar de que se revisan los camiones, "siempre es posible que pasen estas mercancías".
Para esto, y considerando que la pirotecnia entra en el ítem de las armas, se comenzó a trabajar junto a las Fiscalías y las policías investigando mafias que ingresan estas mercancías, señaló Escudero.
En ese trabajo "se han hecho muy buenos decomisos" de armas tras la respectiva preparación para que al encontrar "alguna parte de pieza sospechosa, esta se separa y va un armero de la DGN que revisa físicamente", quien finalmente dice "si es parte o no de un arma". En dicho caso, se denuncia y se realiza la entrega vigilada.
