Carabineros informó que desde el ataque explosivo registrado en el Metro Los Dominicos el 13 de julio pasado, el Grupo de Operaciones Especiales (GOPE) ha acudido a 511 avisos y 158 amenazas, 699 en total, de artefactos explosivos que han resultado ser falsos.
Entre los elementos que el personal policial ha debido inspeccionar hay una caja registradora vieja, un hervidor, una funda de guitarra y una balanza, según El Mercurio.
La estadística corresponde a hechos registrados en la Región Metropolitana, donde existieron en ese mismo lapso tres casos de bombas que fueron neutralizados.
También hubo nueve artefactos que sí detonaron, uno de ellos el que afectó al Subcentro de Metro Escuela Militar.
Las cifras policiales indicaron que hubo 247 avisos de posibles bombas instaladas en la vía pública, dentro de los cuales hubo 62 casos en estaciones del Metro y 32 en paraderos del Transantiago.
Además, respecto a las amenazas de instalación de bombas, la mayoría de los casos (106) fueron contra establecimientos educacionales. También hubo llamados sobre explosivos en dos cuarteles policiales, el Centro de Justicia, dos hoteles y dos juzgados.
En relación a los objetos sospechosos que movilizaron al GOPE, el vespertino indicó que el informe estadístico menciona un carro de feria, un equipo de VHS, una lavadora, un tarro de pintura, una silla de guagua y un termo.
A estos se suman extintores, bombas simuladas y dos granadas de mano de tipo militar. Cada uno de los operativos, según estimaciones de Carabineros, tiene un costo que bordea los cuatro millones de pesos.
