El joven estuvo en riesgo vital tras explotarle, en junio, una bomba que instalaba en un banco.
La Policía estima que actualmente presenta "un buen estado físico" y es capaz de valerse por sí mismo.
La Fiscalía busca adelantar la formalización.
Efectivos de la Dirección de Inteligencia de Carabineros (Dipolcar) han venido realizando en las últimas semanas "seguimientos discretos" al joven anarquista Luciano Pitronello Schuffeneger, de 22 años, quien el 1 de junio pasado quedó gravemente herido tras estallarle en las manos una bomba que instalaba en una sucursal bancaria.
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| Las autoridades temen que Pitronello pase a la clandestinidad para evitar su procesamiento. |
El reporte de la Dipolcar advierte, por esto, que no es posible descartar "que este sujeto, con el afán de evadir su responsabilidad en los hechos investigados, proceda a fugarse, evadiendo los respectivos controles policiales, adoptando una forma de vida en 'la clandestinidad', similar acción de dos prófugos que tienen relación con la investigación de atentados explosivos, identificados como Gabriela Curilem Aránguiz y Diego Ríos González", a quienes se acusa de financiar una supuesta red terrorista dedicada a instalar bombas y distribuir pólvora para elaborar artefactos explosivos.
Ya que "no se pueden apreciar ni detectar problemas de salud de ninguna índole" en el informe de Carabineros, el fiscal Christian Toledo presentó una solicitud para adelantar la formalización de Pitronello por el atentado fallido.
De acuerdo a la publicación, el informe policial también sostiene que las actividades de Pitronello en la vía pública podrían incidir en un eventual ataque en su contra y, en este sentido, el monitoreo de las actividades del joven le entrega "a la vez un grado de protección a su integridad física, ya que tampoco es descartable que determinados sujetos, con el objeto de evitar la cooperación que pudiera brindar Pitronello a la investigación, realizaran un atentado contra su vida".
