El cuerpo estaba tendido entre matorrales y su data de muerte se estima en unas dos semanas.
Fue encontrado por personas que estaban interesadas en comprar el terreno.
El hecho es investigado por la Brigada de Homicidios.
En horas de esta tarde, en la intersección de Tucapel Jiménez con Baquedano, en Coyhaique, dos personas que realizaban mediciones en un sitio eriazo encontraron el cadáver de un hombre de aproximadamente 55 años de edad.
El cuerpo se encontraba tendido en una especie de refugio natural formado por la vegetación del lugar y, por su estado, se estima que podría haber fallecido hace más de una semana.
"Por lo que se puede apreciar a primera vista, se ve una persona mayor, de entre 50 y 60 años. No sabemos su identidad todavía, y en eso va a trabajar la BH y el Servicio Médico Legal", indicó el fiscal Álvaro Escárate.
Las primeras diligencias fueron encargadas a la Brigada de Homicidios, que realizó peritajes para verificar si existen lesiones atribuibles a la acción de terceros, como lo señaló el comisario Mauro Gutiérrez, jefe de la BH Aysén.
"La prioridad es, tal como lo solicita la Fiscalía, verificar la participación de terceras personas, que es lo que se está realizando. No lo puedo confirmar ni descartar, ya que es una investigación en curso", afirmó.
Tras el trabajo desarrollado en el sitio del suceso el cuerpo fue trasladado hasta el Servicio Médico Legal para la realización de la autopsia de rigor.
