La Clínica Sanatorio Alemán de Concepción, donde el sábado 21 de abril se produjo una explosión que provocó la muerte instantánea de tres personas, tenía vencido hace más de dos años el sello verde que certifica la seguridad de sus instalaciones de gas.
Desde la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) se confirmó a Cooperativa que la investigación determinó que dicha certificación había expirado en febrero del año 2016, por lo que el recinto no estaba en condiciones de operar de manera segura.
A través de su página web, la SEC advierte con claridad que las instalaciones de gas en mal estado pueden provocar accidentes, y que sólo una inspección periódica garantiza la seguridad.
La misma indica que las instalaciones de gas en un edificio sólo pueden considerarse seguras "durante la vigencia del SELLO VERDE".
A la vez, ninguna vivienda nueva puede recibir gas si no ha obtenido su sello verde. Sin embargo, una vez en funcionamiento, deben realizar la inspección periódica para que el sello siga vigente.
Eso sí, la interpretación y aplicación de la norma por parte de la Superintendencia da cuenta que no hay prohibición de abastecer gas, ya que el sello verde regula instalaciones interiores y la falla se produjo desde el medidor hacia afuera.
Antecedentes "muy relevante"
Este martes la familia de Víctor Salazar (43), una de las tres víctimas fatales de la explosión, presentó la primera querella por este caso, acusando de cuasidelito de homicidio y homicidio con dolo eventual.
En conversación con Cooperativa el abogado Rafael Poblete, querellante en representación de la familia de Salazar, comentó que el antecedente de la SEC "es muy relevante, porque existe una normativa muy rigurosa de funcionamiento de hospitales y clínicas privadas, que les impone un especial deber de cuidado", en consideración de la situación de las personas que atienden.
Este tipo de recintos "consumen miles de metros cúbicos de gas, es un consumo industrial", pero la indagatoria apunta a que "había una serie de incumplimientos normativos que contribuyeron a generar esta enorme tragedia".
"En el caso del Sanatorio Alemán de Concepción la explosión ocurrió exactamente al lado del Centro Oncológico, donde había un equipo de radioterapia que estaba peligrosamente cerca -fuera de normativa- de un lugar en que se almacenaba una sustancia con peligro de fuga radiactiva", dijo el jurista.
Mientras que el intendente del Biobío, Jorge Ulloa, dijo que "hay un proceso judicial de por medio, por tanto, prefiero que sean las autoridades que correspondan las autoridades que correspondan las que se refieran a una materia como esa".
"Creo que es muy relevante que se revisen todos estos procedimientos, porque la atención a público es una cuestión y esto es una lección para todos", aseveró.
Recinto dice estar colaborando
Consultada por esta información, la Gerencia de Clínica Sanatorio Alemán aseguró estar "colaborando cabalmente en la investigación que realiza el Ministerio Público y otros entes administrativos".
Apelando a la intención de "no interferir" el curso regular de la indagatoria, el recinto evitó emitir mayores comentarios.
La SEC continúa su indagatoria y se espera un informe consolidado en las próximas dos semanas, centrando su foco en las responsabilidades del accidente que generó la fuga y la explosión.