Gustavo Salgado Riquelme, de 32 años, fue condenado en un juicio oral en Linares.
Era el chofer de un furgón escolar que trasladaba a las víctimas a una escuela especial.
"Acá hubo tres violaciones reiteradas. Se rindió prueba suficiente para dar por acreditadas esas violaciones", dijo la Fiscalía.
El Tribunal Oral de Linares condenó a presidio perpetuo simple al chofer de un furgón escolar que violó en reiteradas ocasiones a tres niñas sordomudas cuando las trasladaba en su vehículo.
El fiscal de caso, Iván Vidal, dijo que en el juicio hubo pruebas contundentes para acreditar los delitos de Gustavo Salgado Riquelme, de 32 años, cuyas víctimas tienen ocho, nueve y 13 años.
La madre de una de las pequeñas había identificado un cambio en la conducta de su hija, por lo que solicitó ayuda profesional que permitió detectar qué sucedía. El responsable fue identificado por las niñas con la ayuda de un traductor de lengua de señas.
"Acá hubo tres violaciones reiteradas. Se rindió prueba suficiente para dar por acreditadas esas violaciones, pese a los esfuerzos de la defensa por intentar hacer un trabajo hormiga y desvirtuar las pruebas, en el sentido de atacar la construcción de cada medio de prueba", dijo el persecutor.
"Ello no fue suficiente para derribar la contundencia de las pruebas que fueron ofrecidas y rendidas durante el juicio", añadió Vidal.
El sujeto cometía los delitos en un sitio eriazo ubicado en el trayecto de Colbún hasta Talca, donde las asistían a una escuela especial.
