Una investigación a partir de un delito de "portonazo" concluyó con la detención de 12 personas y el desbaratamiento de un taller clandestino de armas en la capitalina comuna de El Bosque.
A partir de escuchas telefónicas, la PDI logró dar con un sujeto que se dedicaba al tráfico de armas, quien fue detenido en flagrancia.
Durante el operativo se incautaron 24 armas, entre ellas una subametralladora uzi, municiones de diverso calibre, una impresora 3D, y una máquina que fue modificada para rellenar cartuchos de bala, entre otros.
El subprefecto Manuel Muñoz, de la Brigada de Investigación Criminal de la PDI, detalló que el taller se caracterizaba por "chipear las armas", que consiste "en la modificación de la parte trasera de un arma, en términos de que esta no se traba tiro a tiro, la aguja percutora no se traba después de realizar un tiro, y lo que permite es que todos los tiros que se encuentran tanto en la recámara como en los cargadores salgan de una sola vez, en la medida que se aprieta el disparo".
"Esta persona que tenía su taller en el sector sur de Santiago atendía a una infinidad de personas, quienes les encargaban, entre otras cosas, la elaboración y la modificación de distintas armas de fuego", agregó el subprefecto.
El detective también informó que los clientes del detenido lo contactaban vía telefónica y que también concurrían a su taller.
Los 12 detenidos corresponden al "armero", y a los clientes que le encargaban las mencionadas modificaciones y la creación de cargadores. Las evidencias fueron encontradas en los domicilios de todos los detenidos.
Además, se encontraron dos kilogramos de clorhidrato de cocaína, por lo que el Ministerio Público decidió ampliar la investigación para recabar más datos respecto de la incautación de drogas.
