El Tribunal Oral en lo Penal de Iquique, en la Región de Tarapacá, condenó a dos hermanos mexicanos, del Cartel de Sinaloa, como autores de los delitos consumados de tráfico ilícito de estupefacientes y asociación ilícita para el tráfico de drogas.
De forma unánime, la corte justificó la condena afirmando que para ello "ponderó la prueba testimonial, documental, pericial, evidencia fotográfica, videos y audios reproducidos e incorporados en juicio, así como que la participación de los encausados que quedó acreditada con la sindicación espontánea que los testigos de cargo efectuaron de ellos al ser nombrados reiteradamente como las personas que habrían participado los ilícitos ya referidos".
Los hermanos, detalló el fallo, lograron "la importación de la sustancia ilícita a territorio nacional, participando ambos en su posesión, transporte e intento de exportación a Europa".
La corte relató que en base a antecedentes entregados por la DEA de EEUU a Chile, se logró confirmar que los hermanos pertenecían al Cartel de Sinaola y que tenían "la intención de establecer un estructura en nuestro país, con el objeto de aperturar una 'línea de salida'" de cocaína importada desde Bolivia, las que se acopiarán en la comuna de Alto Hospicio para finalmente, "haciendo uso de las plataformas portuarias y aeroportuarias, lograr su envío hasta diversos puertos y aeropuertos de Europa".
Para ello, precisa el fallo, usaban informantes y agentes encubiertos tomaban contacto con supuestos empresarios "asentados en Europa" para realizar los primeros acercamientos y verificar la factibilidad para que pudieran usar a Chile como centro de acopio de la droga.
Luego de estos contactos, uno de los condenados -identificado con las iniciales RST- llegó a Chile para montar las redes logísticas y crear los vínculos necesarios para que la organización lograra su objetivo.
El sujeto ingresó a la Región de Tarapacá de forma clandestina el 4 de septiembre de 2020 por el sector fronterizo de Colchane y desde entonces comenzó a reclutar a una serie de personas para que cumpliera las funciones que la organización necesitaba para lograr sus objetivos, como tomar contacto con proveedores bolivianos.
Esto implicaba adquirir la cocaína que posteriormente sería remesada a Chile para su posterior acopio. Además debían hacer reservas hoteleras, conocer la situación portuaria y aeroportuaria de nuestro país, recibir remesas de dinero desde el extranjero, recibir las remesas de drogas enviadas desde Bolivia, acopiarlas y trasladarla cuando RST lo dispusiera.
Junto a los informantes y agentes reveladores, el sujeto conoció el Puerto Seco de Iquique, visitó el Puerto de Iquique, el aeropuerto Arturo Merino Benítez, en Santiago y el puerto de Valparaíso.
Así conociendo ya la línea, capacidad logística y operativa con la cual contaban los sujetos reclutados, informó a los líderes de esta célula del Cartel de Sinaloa en el extranjero y financistas que efectivamente nuestro país y las personas contactadas y reclutadas, reunían las condiciones y capacidades requeridas para las operaciones que pretende realizar la organización.
El objeto inicial de la organización operada en Chile por RST es internar desde Bolivia, para su posterior acopio en la comuna de Alto Hospicio, seis mil kilos de clorhidrato de cocaína, que luego sería enviada en seis remesas en distintos contenedores cargados con productos agropecuarios de exportación, de manera sucesiva, desde los puertos, hasta diversos puertos europeos y, al mismo tiempo, traer a Chile diez millones de dólares para operar toda la logística necesaria.
El fiscal regional de Tarapacá, Raúl Arancibia, detalló que "el trabajo fue muy importante por cuanto se pudo utilizar todas nuestras técnicas de la Ley 20.000 en forma muy exitosa y que culminó con la detención de estas personas y además se pudo coordinar e intercambiar antecedentes con la policía española fundamentalmente porque el destino de la droga iba a ser Europa, entrando por España".
"El juicio, ya terminado, reconoce en su veredicto los vínculos que se tenían con este cartel mexicano, conocido por su peligrosidad y su tamaño", agregó el persecutor.
LOS CABECILLAS
Las operaciones ilícitas que R.S.T. debía ejecutar en Chile le eran instruidas por su sobrino, miembro activo del cartel de Sinaloa, líder de la célula de la cual forma parte el condenado, quien estaría identificado como Morris O'Shea, ciudadano irlandés-mexicano, quien reside habitualmente en Barcelona España, operando o liderando esta célula del cartel en algunos momentos desde Europa y en otros desde México.
Todas estas operaciones fueron financiadas económicamente en gran parte por quien fue identificado como Patrick Joseph Daly, ciudadano británico, quien actuaba además bajo una identidad falsa, que corresponde a Garry James Steele.
Así, el 28 de octubre de 2020, internaron por el sector fronterizo de Colchane dos paquetes contenedores de clorhidrato de cocaína con un peso neto de 1.910 gramos, la que el día siguiente fue examinada por RST.
Luego de que verificara la calidad de la sustancia e informara de esto a miembros "superiores" de la organización, esta otorgó su aprobación para la compra de una segunda remesa, de cerca de 50 kilos de clorhidrato de cocaína, la que tendría por objeto ser enviada como una primera muestra a Europa.
El 9 de diciembre, cerca de las 21:00 horas, luego de haberse acordado por instrucciones de RST y su organización la importación de una segunda remesa de sustancias ilícitas con proveedores bolivianos, se dispuso que en un punto fronterizo de la Región de Tarapacá, cercano a Colchane, dos sujetos no identificados pusieran a su disposición 54 paquetes contenedores, a su vez, de 55.050 gramos neto de clorhidrato de cocaína, los que fueron pagados a través de remesas provenientes desde Europa y Dubái a Santa Cruz de la Sierra en Bolivia.
Luego de recibida esta segunda remesa, la organización efectuó el pago de una futura tercera remesa la que, unida a las dos remesas anteriores, completaría un total de 350 kilos de clorhidrato de cocaína. Dicha sustancia fue ingresada el 14 de enero de 2021 vía aérea en el sector de Cariquima. Sin embargo, pese a que esta tercera remesa de sustancias ilícitas no logró ser materialmente ingresada a Chile, el agente e informante que trabajaban con RST informaron que dicha sustancia había ingresado exitosamente y que la mantenían acopiada en la comuna de Alto Hospicio.
MADRE DE O'SHEA LLEGA A CHILE
Mientras el sujeto gestionaba las operaciones a partir de las instrucciones impartidas por su sobrino, el condenado comenzó a sufrir una serie de padecimientos que fueron mermando su estado de salud, lo que incluso lo obligó a internarse en diferentes centros médicos de Iquique.
Debido a esta situación, su hermana -identificada como YST- y madre de O'Shea llegó a Chile para apoyar a su hermano, teniendo cabal conocimiento además de las operaciones ilícitas desarrolladas por aquel a partir de las instrucciones impartidas por su hijo.
Desde su arribo a Chile, YST tomó parte en las decisiones que correspondía a su hermano en relación a las operaciones ilícitas en curso, recibiendo requerimientos e instrucciones de su propio hijo Morris.
La enfermedad de RST provocó un cambio en la modalidad como se pretendía enviar la droga a Europa, ya que inicialmente se buscaría comprar mercadería lícita sustituyéndola por droga, sin embargo, a partir de esta situación se buscó efectuar una remesa inicial de sustancias ilícitas vía marítima a través de la modalidad de "gancho ciego" o rip off, para luego efectuar remesas de drogas vía aérea.
CARGA FICTICIA
Concretamente la droga fue trasladada el 28 de enero de 2021 desde la Región de Tarapacá hasta el puerto de Valparaíso, donde un agente encubierto realizaría su ocultamiento en contenedores que fueron posteriormente cargados en diversos buques, con destino a distintos puertos de Europa.
El destino final del conteiner sería el puerto de Antwerp, Amberes, Bélgica, lugar determinado y exigido por RST para el arribo de la sustancia, toda vez que este es uno de los sitios de los puertos europeos que se encuentra "bajo control" de los miembros de la célula del cartel de Sinaloa en Europa.
Tras reuniones para inspeccionar la droga y su calidad, la carga ficticia de la sustancia ilícita se realizó el 4 de febrero de 2021 y zarpó al día siguiente hacia Antwerp, Amberes, Bélgica, materializando un envío ficticio de 665 kilos de droga tipo clorhidrato de cocaína, de los cuales 350 eran de propiedad de la organización integrada por los hermanos y los restantes, pertenecerían "ficticiamente" a otra organización.
Este contenedor, en primera instancia, haría escala en Rotterdam-Holanda en los primeros días de marzo de 2021, para luego arribar al puerto de Amberes-Bélgica.
EL ROL CLAVE DEL AGENTE ENCUBIERTO
Paralelamente, previa coordinación entre las fiscalías de España y Chile, se designó en marzo de 2021 un agente encubierto, que actuaría en dicho territorio, quien sería un contacto que operaría en el aeropuerto de Barajas, Madrid, y estaría en condiciones de recibir la droga que sería remesada vía aérea, teniendo la posibilidad y capacidad logística de extraer la droga de manera segura desde los contenedores en los que sería oculta para viajar a bordo de aeronaves hasta España y, una vez con la droga en su poder, haría entrega de ella a quien determinarán los hermanos y Morris O'Shea.
En ese contexto, el agente encubierto tomó contacto telefónico en ciertas ocasiones con O'Shea, sin embargo, no pudo concretarse una reunión personal entre ambos.
Finalmente, los hermanos fueron detenidos el 10 de marzo 2021 en el aeropuerto Arturo Merino Benítez cuando intentaban abandonar Chile.
La audiencia de comunicación de la sentencia quedó programada para las 12:40 horas del martes 5 de diciembre próximo.