El sujeto se encuentra en prisión preventiva tras ser formalizado en Río Negro.
Los dos hijos, de cuatro y siete años, se encontraban en la misma habitación cuando ocurrieron los hechos.
La mujer se encuentra internada en el Hospital de Puerto Octay.
Daniela Aravena, joven que resultó con quemaduras graves luego que su pareja le lanzara una olla con agua hirviendo, aseguró que "gracias a Dios" está viva tras los constantes hechos de violencia de los que ha sido víctima.
La mujer de 25 años relató a Cooperativa que sus dos hijos, de cuatro y siete años, vieron como su pareja, Rodrigo de la Guarda, la atacó este domingo en la vivienda que comparten en Puerto Octay.
"Veníamos de comprar cosas, íbamos a comer a la casa y se enojó. En ese momento estaba la estufa a gas ahí con las salchichas cociendo, hirviendo el agua y me dijo 'tu siempre con tu cuestión' y me tiró todo en la cara", dijo.
"Mis niñitos estaban atrás mío, ellos vieron todo lo que pasó. Él se arrancó, dijo que se iba a matar. Yo había puesto una denuncia porque él me pegó en la calle, pero yo aguanté harto tiempo, desde que empezamos él siempre fue así", sostuvo Aravena.
"Yo pensaba que él iba a cambiar y él reaccionó así, me tiró la cuestión. Me quemé toda la cara y el cuerpo", recordó.
La joven indicó que "su ex mujer igual lo demandó porque quiso abusar de ella, pero yo siempre seguí con él porque había cambiado en ese aspecto de tomar, pero seguía agresivo. Llegó a un límite y gracias a Dios estoy viva".
El sujeto de 38 años fue formalizado en el Tribunal de Río Negro por los delitos de lesiones graves en contexto de violencia intrafamiliar y secuestro, por haber encerrado a la mujer y sus hijos bajo llave, quedando en prisión preventiva.
La fiscal jefe de Río Negro, Leyla Chaín, recalcó que "después de estos hechos, el agresor encierra a la víctima y a los menores de edad en el domicilio, por lo tanto son los gritos de auxilio de la mujer y los niños los que en definitiva alertan".
"Estamos coordinando para poder realizar una asistencia integral tanto a la víctima como a los niños. Había una denuncia previa de noviembre de 2015 y en esa oportunidad nosotros acogiendo la petición de la víctima de que quedara el agresor con alguna prohibición de acercarse se pactó con él el sometimiento a un tratamiento sicológico", sostuvo.
La mujer está recuperándose de sus quemaduras en el Hospital de Puerto Octay.
