Los policías habían recibido una denuncia por ruidos molestos en el sector.
"He sido categórico en que los espacios son de todos los vecinos, pero para usarlos de manera ordenada y respetuosa", indicó el alcalde Desbordes.
Una verdadera pelea campal se registró en la tarde de este viernes en la Plaza de Armas de Santiago cuando Carabineros, tras recibir una denuncia por ruidos molestos, solicitó a un grupo evangélico bajar el volumen de los parlantes que usan para hacer sus prédicas.
La situación llegó a los combos ante la negativa de un grupo de ellos, quienes golpearon y dejaron con lesiones a dos funcionarios policiales.
Según se ve en videos publicados en redes sociales, Carabineros lanzó gases lacrimógenos en la plaza donde varios niños comenzaron a llorar.
Batalla campal en Plaza de Armas: Los pacos versus los evangélicos.
— Difamador (@difamadores) March 21, 2025
Todo comenzó a eso de las 19 hrs cuando una pareja de Carabineros solicitó bajar el volumen a los parlantes con los cuales predicaban unos 200 evangélicos.
Cuando los pacos intentaron detener al pastor, quedó la… pic.twitter.com/TGdgVw3iYn
El coronel Claudio Pavez, de la prefectura Santiago Central, detalló que una mujer se acercó a Carabineros para reclamar por el ruido.
"Carabineros se traslada al lugar, diáloga con las personas para que bajen la música. En esos instantes las personas aumentan el volumen y el carabinero, al momento de intentar cursar una infracción por los ruidos molestos, es que estas personas que están ahí, que son como 70 personas, solidarizan con el fiscalizado y se produce la agresión", detalló.
La policía, en tanto, informó que debieron resguardar la Primera Comisaría de Santiago ante las amenazas de una turba.
🔴AHORA | Grupo evangélico golpeó a funcionarios de Carabineros que solicitaron bajar el volumen de sus parlantes en Plaza de Armas.
— Bryan Galvez Silva🔻 (@BryanGalvezS) March 21, 2025
Dos carabineros resultaron heridos. Por lo que se ha debido resguardar la primera comisaría de Santiago ante amenazas de turba.@Cooperativa pic.twitter.com/geUFAtKwdg
El alcalde de Santiago, Mario Desbordes, condenó los hechos y remarcó que la actividad no contaba con autorización municipal.
"He sido categórico en que los espacios son de todos los vecinos, pero para usarlos de manera ordenada y respetuosa. Es importante recordar que toda actividad en bienes nacionales de uso público debe solicitarse" a través de la web de la municipalidad.
