Tras la muerte de uno de las excursionistas que quedaron atrapados en el volcán Lonquimay durante el fin de semana, uno de los integrantes del grupo, René Galindo, reconoció que no estaban bien preparados para las malas condiciones del lugar.
Según consignó La Tercera, Galindo permanece internado en el Hospital Regional de Temuco, desde donde recordó que "nos desviamos de la ruta y ahí se borró el camino, no estábamos bien preparados".
Además, explicó que subieron por "negligencia del grupo", añadiendo que "la imprudencia te puede llevar a un caos. Sabíamos de las condiciones del clima y que en la tarde habría una nevazón, podíamos habernos retractado cuando empezó y no lo hicimos, porque estábamos a pocos metros de llegar a la cumbre".
"Usamos mantas de lluvia que tenían unos compañeros y eso ayudó a amortiguar el viento (...) no fuimos preparados para estar arriba", dijo.
Alejandra Aldea, hermana de Rodolfo, otro de los excursionistas, sostuvo que "se confiaron. Era un grupo más de amigos que de deportes o de aventuras".
"Iban por un par de horas y volvían a unas cabañas, por eso no era una subida formal. El problema es que fallaron unos instrumentos y cayó una tormenta de nieve", agregó.
El grupo estaba compuesto por seis mujeres y cinco hombres de entre 40 y 61 años, quienes estuvieron perdidos por casi 48 horas.